CULTURA

La SGAE incluye a Antonio Rojano en su primer libro de 'Teatroautor Exprés'

Por su obra 'DioS K', junto a Santiago Cortegoso, Félix Estaire, Lupe Gehrenbeck y Jan Vilanova

Antonio Rojano
photo_camera Antonio Rojano, dramaturgo cordobés

La Fundación SGAE ha publicado las obras ganadoras de la I Convocatoria de Teatroautor Exprés 2016 dentro de la colección homónima que la entidad promueve con el objetivo de contribuir a la difusión de la dramaturgia contemporánea. En concreto: 'DioS K', de Antonio Rojano, 'Raclette', de Santiago Cortegoso,  'Motel Oh!', de Félix Estaire, 'Cruz e mayo', de Lupe Gehrenbeck, e 'hISTORIA', de Jan Vilanova.

La colección Teatroautor Exprés persigue la difusión y promoción de obras de teatro recientemente estrenadas. Una iniciativa "necesaria, que permite que los textos se conozcan y lleguen a personas y profesionales que no pudieron acudir al estreno", explica el cordobés Antonio Rojano, que acaba de estrenar Furiosa Escandinavia en el Teatro Español.

"Publicar una obra permite que tenga más recorrido que si sólo está sobre las tablas, posibilita entregar el texto a agentes de otros países interesados en su producción. Tenerla editada, ver las letras sobre el papel, es algo muy tierno", declara Félix Estaire.

Un jurado profesional, compuesto por los críticos y especialistas Alfonso Becerra, Guadalupe Soria y Rosana Torres, seleccionó las obras entre más de 21 textos enviados. Dos de los textos seleccionados estaban escritos originalmente en gallego y catalán: Raclette de Santiago Cortegoso e hISTORIA de Jan Vilanova Claudín.

Ambos autores apostaron por la traducción de su obra para formar parte de esta colección: "Editar la obra en castellano era una gran oportunidad, sirve como material de promoción y permite que llegue a más espectadores", señala Vilanova.

Lo afirma también Cortegoso: "Si a los autores de teatro nos cuesta mucho publicar, imagina en otra lengua. Me interesa darla a conocer en castellano pero para mí sigue siendo prioritario el montaje en gallego", confiesa.

Los cinco títulos realizan un recorrido por las diferentes caras de esta sociedad. Cinco mosaicos que indagan sobre las estructuras de la sociedad actual, a veces incompatibles entre ellas, como describe Santiago Cortegoso en su Raclette. "Es un teatro muy contemporáneo. Mi obra trata muchos conflictos diferentes que pertenecen a nuestras vidas, los personajes son muy reconocibles y por eso es tan cercana a los espectadores", explica el autor.

Obra colectiva

También Gehrenbeck se atreve en Cruz de Mayo a realizar una disección sobre el matriarcado y "el desprecio con el que nuestra cultura castiga el envejecimiento", mientras que Antonio Rojano con DioS K, obra colectiva basada en la novela Karnaval de Juan Francisco Ferré, analiza los excesos y la capacidad destructiva del poder en los que se asienta un Occidente en crisis.

Su pieza devuelve a la palestra el caso de Dominique Strauss-Kahn y supone "una apuesta por las nuevas formas de contar historias de los autores de hoy" en la que director escénico y dramaturgo trabajaron "codo a codo sobre el escenario".

Por su parte, Vilanova propone un viaje hacia la Europa más deshumanizada del siglo XX que se da la mano con el día de hoy. Casualidades encerradas en  hISTORIA que "han interesado muchísimo al espectador como una forma de recuperar el pasado".

Sobre las alternativas de nuestros propios caminos, llenos de posibilidades y elecciones que siempre atormentan, escribe Félix Estaire en Motel Oh!, "una obra con tintes clásicos para el espectador contemporáneo que ofrece una extraña poesía dicha en un mundo nada poético, el universo motero", expone el dramaturgo.

Antonio Rojano (Córdoba, 1982) es autor, entre otras obras, de Sueños de arena (2006), La decadencia en Varsovia (2007), Katiuskas (2012), Hombres que escriben en habitaciones pequeñas (2014), La ciudad oscura (2015) y Furiosa Escandinavia (2016). Su texto Nací en el Norte para morir en el Sur fue traducido al inglés y leído en el Royal Court Theatre de Londres durante el verano de 2010, donde participó como dramaturgo residente en la 23ª Residencia Internacional. Ha recibido numerosos reconocimientos, como el Premio Nacional de Teatro Calderón de la Barca, el Premio Marqués de Bradomín o el Premio Lope de Vega de Teatro