Paco de Lucía regresa el próximo domingo, día 11, a Córdoba, al Festival que mejor encumbra el instrumento que el maestro de muchos sabía interpretar como nadie, porque más que hablar con palabras se expresaba en todos los sentidos acariclando las seis cuerdas. Y vuelve a una ciudad que le encantaba, no sólo por ser cuna de 'Fosforito', sino porque la capital le tenía encandilado.
Evidentemente, el genio de la guitarra no podrá estar presente, pero su vacío lo van a tratar de cubrir sobre las tablas un buen puñado de artistas que lo han acompañado en su vida y su carrera y con los que De Lucía se sentía agusto, como son su sobrino Antonio Sánchez y Josemi Carmona a la guitarra, David de Jacoba y Duquende al cante, 'Farru' al baile, Jorge Pardo al saxo y flauta, Carles Benavent al bajo, y Poti Trujillo en la percusión.
El espectáculo se denomina 'Una noche por Paco', un proyecto para celebrar la figura del legendario guitarrista de quien monstruos como Keith Richards o Mark Knopfler cantaban alabanzas, y un homenaje único que llevará al escenario a algunos de los mejores protagonistas de la escena flamenca. Irónicamente a Paco de Lucía no le gustaban los homenajes y no se sentía cómodo, pero en esta ocasión no podrá sentirse ofendido en el marco del Festival de la Guitarra que visitó en siete ocasiones.
El presidente de la Fundación Pado de Lucía, Francisco Porras, que apoya completamente este proyecto, ha agradecido esta mañana a la ciudad de Córdoba acoger la iniciativa, "porque la gente de aquí adora a Paco", y ese amor era recíproco.
Esta Fundación "recien creada" nace con la responsabilidad de "seguir contribuyendo los caminos que el maestro trazó y seguir difundiendo su legado y que esa lucha que él tuvo toda su vida siga estando presente y viva". Una lucha que incluía la idea de que el Flamenco fuerra categoría pura. "Esa lucha sigue viva y como cordobés me hace ilusión que sea aquí donde se produce el homenaje".
En la presentación ha estado el director de cine Curro Sáncherz, junto con su hermana Casilda, ambos hijos de guitarrista, quienes han asegurado sentirse "encantados" por este "gran concierto homelaje a mi padre con los musicos que le han acompañado siempre y que se produzca aquí, en Córdoba, con quien Paco mantenía una relación especial, porque le parecia una de las ciudades más bonitas del mundo".
A principios de la década de 1980, el guitarrista y compositor Paco de Lucía formó un sexteto que, por su instrumentación y enfoque jazzístico, cambiaría para siempre el sonido del flamenco. En él ya se encontraban algunos de los músicos que podremos ver en la noche del domingo, como Jorge Pardo o Carlos Benavent.
El maestro Paco de Lucía tardaría 20 años en crear otro grupo que le diese tanto el apoyo como el empuje que necesitaba para su talento y visión. El núcleo de estos jóvenes talentos se unió en 2004 para la grabación de “Cositas Buenas” con el que Paco de Lucía ganó un Grammy Latino y que ahora son quienes abanderan este proyecto homenaje.
Aun así, en este concierto del Festival de la Guitarra de Córdoba se reúnen miembros de ambas formaciones para recordar 30 años de evolución constante que cambió la historia de la guitarra y el flamenco para siempre. “Para nosotros es un homenaje a un genio, a un maestro, a un compañero en tantas aventuras; a alguien a quien amamos mucho”, señala Antonio Sánchez, sobrino de Paco de Lucía. “En este proyecto, cada uno de nosotros contribuye con nuestra parte para celebrar a Paco y a su obra”, añade.
Antonio Sánchez comenzó a tocar a una edad muy joven bajo la atenta mirada de sus tíos, Paco y Ramón de Algeciras, y su primo J.M Bandera. Su padre Antonio, que murió solo dos meses después del fallecimiento de Paco, es el único de los hermanos que no siguió una carrera artística. Sánchez también estudió con Juan Manuel Cañizares, que este jueves inauguró esta 40 edición del Festival, y trabajó con compañías de baile y en tablaos, especialmente el popular tablao Cordobés de Barcelona. En 2010 se unió a su tío como segunda guitarra, reemplazando a la entonces incipiente estrella del flamenco Niño Josele.
“Paco me vio tocar solo algunas veces, pero cuando necesitó un guitarrista, alguien le sugirió mi nombre y me contrató”, recuerda Sánchez. En cuanto a la diferencia entre el tío Paco y el jefe Paco, Sánchez afirma: “Paco siempre fue el mismo, en el escenario, en la calle o en casa. Era muy humilde y con un gran sentido del humor.
Cuando este grupo tocaba con él había una gran complicidad entre todos nosotros: miradas, sonrisas, un guiño de comprensión. Había mucha comunicación sin palabras. Se parecía mucho a una familia”.
En su opinión, Paco había creado un nuevo sonido con su primer grupo, y otro con esta banda, “porque está compuesta por músicos de una generación diferente a la suya; había llegado a un enfoque diferente de la composición y de la sonoridad”. Y eso es uno de los aspectos más interesantes de este homenaje: Unir sobre el escenario a dos generaciones distintas de músicos; dos generaciones a quienes la música de Paco de Lucía ha influido sobremanera. “Para todos nosotros, reunirnos en honor a Paco y recordar momentos e historias de los conciertos y las giras es una gran alegría”, concluye su sobrino.
En el escenario, Paco de Lucía daba a su banda mucha libertad. Con su primer sexteto tuvo que crear todo desde cero, no había modelos. Sin embargo, “los miembros de nuestra banda crecieron escuchando a Paco, así que llegamos con nuestros deberes hechos. La dinámica era diferente”, añade Sánchez.
Los asistentes a este concierto podrán disfrutar de diferentes joyas de Paco de Lucía, como “El cafetal”, “Bulería del pañuelo”, “Canción de amor”, “Moraito siempre”, “Zyryab” o “Entre dos aguas”, así como música original de los miembros de la banda. “Llevo la música de Paco con gran humildad, es un gran desafío”, explica Sánchez, quien, al llevar el apellido de Paco y ser el guitarrista del grupo, tiene la carga adicional de “interpretar al maestro”.
Por cierto, los precios van de 23 a 25 euros y será a partir de las 22.30 horas en el Teatgro de La Axerquía.
