¿Qué pasaría si se funden el sabor de la República Dominicana con la tradición cordobesa y algunos toques asiáticos o de India? Sencillo, el resultado sería 'Otra Vaina' ('Otro Rollo'), un rincón del barrio de Huerta de San Rafael, en el Distrito Norte-Sierra, que parece haber dado por fin con la tecla, tras un demasiado abundante número de negocios que no han terminado cuajando.
La verdad es que se abrió en un momento muy delicado. El pasado 4 de febrero, poco antes de que nos cayera encima una pandemia de la que hasta entonces sólo teníamos referencias lejanas. Y ahí sigue, tras un duro confinamiento (del 13 de marzo al 12 de mayo) que casi acaba con numerosas pymes y servicios, reponiéndose a las adversidades merced a cuatro ingredientes imprescindibles: La juventud de quienes llevan el bar o gastrobar, su extremada simpatía, sus ganas de superarse y, por supuesto, su cocina.
¿Se me había olvidado comentar que de fondo puede sonar Bachata pura para entendidos o bien en versión más light para iniciados? Se te mueven los dedos tamborileando al ritmo de la música la botella o la copa, según lo que tengas en ese momento en la mano. Y, por cierto, ¿Adivinan cual es la mascota del local? El pequeño Groot de la película Los Guardianes de la Galaxia, creado para el cómic Marvel por Stan Lee, el gran Jack Kirby y Larry Lieber.
Por lo pronto, y hay que insistir en ello, tiene algo muy a su favor y muy del gusto de cordobeses y cordobesas que miran en este sentido con envidia sana a granadinos, jienenses y almerienses: Una buena tapa que acompaña a la consumición. Y en este caso, no sirven cualquier cosa, sino platitos de elaboración casera que arrancan más de un gemido de placer (en el sentido gastronómico del término) a más de uno y una que los cata.
Que se saben reinventar para seguir avanzando lo demuestra la fórmula que se han sacado de la manga en un principio para aportar su propia gotitas de originalidad al Oktoberfest germano. y que va a continuar más allá del citado y cervecero mes: Las catas-maridaje con cerveza.
Daniel Millán es un joven de Bujalance con inquietudes gastronómicas. Pero no es él quien maneja el fuego en el interior, que eso corresponde a la titular del negocio y cocinera. Él, además de camarero y relaciones públicas, es el encargado de presentar esas catas en las que investigar qué casa en la boca con determinada bebida. "La idea era que la gente fuera conociendo cervezas distintas y se abrieran a estilos diferentes que no son muy comunes en Córdoba, y lo hicimos a partir de alguna experiencia que tenía yo antes organizando catas y asistiendo a catas y decidí organizar una de prueba", explica.
Fue el 6 de octubre y no salió mal, adaptando las tapas que ofrecen a sabores foráneos, porque se suele hacer con cerveza de importación, a sus características, a su fuerte y también a los contrastes que pudiera haber para que la gente tuviese una experiencia más completa.
El otro fin de la cata es que los clientes y clientes tuvieran opciones también el día que ellos quisieran comprar una cerveza alternativa a la que se suele consumir y darles un poco de vida a las cervezas con menos representación en los bares de Córdoba.
Los interesados en esta actividad sólo tienen que comunicarlo. "Nosotros la red social con la que funcionamos actualmente es Instagram (@otravaina2020) y para disfrutar de una experiencia más personal y exhaustiva, sabiendo cosas de la cerveza que no hubiesen averiguado de otra manera, lo único que hay que hacer es contactar con nosotros y dependiendo de las características del grupo les montamos su propia cata-maridaje", señala Daniel Millán.
Habitualmente 'Otra Vaina' cuenta con entre 12 y 14 cervezas distintas, de estilos diferentes y de distintos países. "Es algo muy orgánico, porque las vamos modificando y trayendo cosas nuevas cada vez que acabamos una referencia". De hecho, a las catas suelen traer alguna cerveza más novedosa u orientada al tipo de grupo que venga.
Millan reconoce no ser experto, pero sí un gran conocido. Y sus conocimientos los ha adquirido en base al interés "más egoísta posible, y es que me gusta mucho la cerveza". Cuando empezó a estudiar la carrera adoptó la costumbre de descubrir alguna cerveza nueva cada semana y ese hábito ha acabado derivando en coleccionismo de cervezas de importación. Por tanto, la formación "la adquiero aquí a diario y mi propia experiencia y eso, tras cinco años buceando en este mundo, me permite dar una guía a los cerveceros de diario".
El maridaje con la comida es lo más complicado. "Me lleva un tiempo y una cierta planificación y algo de investigación", y para ello nada mejor que buscar en las páginas web de cualquier cervecería o distribuidores donde se incluyen notas de catas y hasta recomendaciones a la hora de maridar.
En este gastrobar la comida está muy orientación al aperitivo. "Nos gusta la cocina de fusión; la titular del negocio y cocinera es dominicana y tenemos una mezcla de culturas importante. Yo soy muy fan de la comida asiática, india y lo incorporamos. Y siempre va ligado al tipo de cerveza que traigamos", aclara.
Así, por ejemplo, no es raro ver maridar una cerveza IPA con unos tacos de pollo con cebolla encurtida (Tikka masala), o una cerveza clara mexicana, la Modelo Especial, reconocida como una de las mejores de este tipo del mundo, con unos nachos de guacamole y pico de gallo casero.
Y si tienen suerte, pueden toparse con su excelente bocadillo cubano, que casaría a la perfección en una cata. "Iría muy bien con una IPA, por ejemplo, porque se compone de una pasta de cerdo, macerado durante 48 horas, con varios ingredientes, entre ellos, el ajo, el cilantro, la mostaza, con sabores muy radicales y pactan muy bien con el amargor típico de la cerveza IPA, que se te queda agarrado en la boca, bajo el paladar y no es tan cítrico como sería un mango".
Evidentemente, la cata viene acompañada de una explicación en mesa sobre la historia de la marca, curiosidades o alguna anécdota relacionada y los procesos de elaboración.
Debido a las restricciones por la Covid, el límite es de seis personas y concertados con anterioridad. Si bien, en casos de grupos mayores se pueden separar las mesas en dos distintas.
Por probar que no falte.
