La novelista Donna Leon, superventas, seguida por millones de personas y creadora del comisario Brunetti, ha declarado antes de su intervención en Cosmopoética esta tarde que se siente en Córdoba "como en Pompeya dos años antes de la erupción del Vesubio". ¿Qué quiere decir exactamente esto? Esta es la tercera vez que Leon viene a Córdoba. Estuvo ya hace 35 años y luego hace tan sólo diez. La ha definido como un lugar de enorme belleza concentrada en un centro muy compacto. Y esto tras hacer un gesto con la cabeza de auténtica conmoción ante semejante atractivo. Pero precisamente por sus visitas anteriores ha visto un gran crecimiento del turismo. Ese turismo masivo podría ser a su juicio el volcán que podría destruirnos.
La novelista americana vivió durante décadas en Venecia, por lo que ha manifestado conocer muy de cerca los efectos del turismo masivo al explicar cómo en una ciudad como la italiana, que tiene en total 54.000 habitantes si se cuentan todas sus islas, recibe cada año a 33 millones de turistas, que en concreto van sobre todo a las habituales zonas visitables, donde sólo vive una población de unos 18.000 habitantes. Así que en un momento determinad"o dijo basta. "Ahora vivo en un pueblo suizo con 300 habitantes y 300 vacas".
Leon ha hablado de multitud de cuestiones ante los periodistas en la sala Orive, con un excelente sentido del humor y de forma muy histriónica. Si el turismo masivo le preocupa también lo hace el planeta en sí. Esta preocupación ecológica aparece en sus novelas. Y al respecto no ve solución posible: "Me enteré de que un día determinado de julio hubo 495.000 vuelos en el mundo. Yo me preocupo de reciclar la basura, de cerrar el grifo para no desperdiciar agua...¿pero qué se puede hacer ante eso?". A partir de ahí ha ironizado situándose dentro del problema, pues ha venido a Córdoba en avión y volverá a su casa también en avión. De paso le ha deseado el premio Nobel a la joven ecologista Greta Thunberg.
¿La verdad o la mentira?
El humor de la novelista empezó nada más empezar el acto al preguntar a los propios periodistas si prefería que hablase sobre su obra de mentira, es decir, lo que se espera que dijese, o de verdad. Y de inmediato se puso a imitar engoladamente a un personaje de escritor pedante, remedando un discurso teatral en el que contaba que su obra estaba movida por la búsqueda de la justicia social. Y luego tras una pausa vino el discurso realista, con el que ya Donna Leon, y no el personaje , habló sobre algo que jamás hay que hacer: caer en la tentación de predicar. Para ella la labor fundamental del novelista es crear personajes de todo tipo y que sea el lector el que se encuentre con la capacidad de decidir, sin sermones. Leon concluyó de forma taxativa: "el autor debe desaparecer".
Cosmopoética y Donna Leon
Con respecto a su intervención de esta tarde en Orive, pero ya en la sala, no en el palacio, Leon ha indicado que será un formato entrevista, por lo que no ha podido adelantar nada. El entrevistador será el novelista cordobés Salvador Gutiérrez Solís. Leon ha indicado que este formato es mucho mejor y más interesante que ponencia.
Con respecto a la poesía en su obra ha indicado que aparece fundamentalmente en forma de citas o referencias a otros autores, pero no manifiestamente.
