DÍA MUNDIAL DE LA NUTRICIÓN DEDICADO A LA HIDRATACIÓN

Córdoba, en el top 10 de los españoles con una mejor hidratatación corporal

El grupo de edad en que los cordobeses cuidan más su salud hídrica se sitúa entre los 46 y los 55 años y los que peor, entre los 18 y los 35 años y los que sobrepasan los 56 años

Agua el grifo
photo_camera Los cordobeses están entre los españoles que mejor se hidratan

Por razones obvias, los cordobeses, junto con los onubenses, son de los españoles que mejor cuidan de su hidratación, según un estudio sobre el comportamiento de la población andaluza ante el cuidado de su hidratación elaborado por la empresa Super Premium Diet, con motivo del Día Nacional de la Nutrición, que se celebra hoy, bajo el lema este año de 'Hidratación también es salud'.

El informe ha contado con más de 3.000 farmacias como puntos de recogida de información, con una muestra compuesta por más de 42.000 personas de todos los puntos del territorio nacional. Para el establecimiento del índice de hidratación, esta firma de servicio de asesoramiento nutricional en las farmacias españolas perteneciente al Grupo NC Salud ha empleado los criterios de género (los hombres cuentan con niveles de hidratación más altos que las mujeres) y edad (a más años, menor es el nivel de agua en el organismo), analizando la composición hídrica corporal de los sujetos de estudio, valorando el equilibrio entre el agua intracelular y extra celular, así como el nivel de agua total del organismo.

La principal conclusión del estudio refleja que Huelva es la provincia andaluza que cuenta con los mejores resultados en Índice de Hidratación, y se cuela, además, en el top 10 nacional en mejores resultados de salud hídrica junto a Córdoba, ocupando la séptima y octava posición, respectivamente. En el lado opuesto del ranking andaluz se encuentra Cádiz, donde los mayores descuidos se producen entre los ciudadanos mayores de 55 años.

Sevilla, a pesar de tener el mismo clima que Córdoba, está en el puesto 35 del ranking nacional en hidratación

Ya fuera de las diez primeras provincias mejor hidratadas se sitúa Málaga, en el puesto número doce; seguida de Granada, en el 22; Jaén y Almería ocupan las plazas 26 y 27, y lo más incomprensible, Sevilla, que tiene un clima y unas temperaturas muy similares a las cordobesas, además de estar igualmente ambas en el valle del Guadalquivir regadas por el mismo río, está en la posición 35 del ranking nacional. Como se ha dicho antes, Cádiz es la última de Andalucía, en el puesto 43 nacional.

Datos de la provincia de Córdoba

En cuanto a la provincia de Córdoba, el estudio especifica que el grupo de edad en que los cordobeses cuidan más su salud hídrica se sitúa entre los 46 y los 55 años. Por contra, los que peor están son los jóvenes entre los 18 y los 35 años o bien los que sobrepasan la barrera de los 56 años. Por sexos, la mejor edad para el hombre en materia de hidratación está entre los 36 y los 45 años, y la peor, a partir de los 56 años, mientras que entre las mujeres, las que están entre los 18 y los 35 años son las que se cuidan más, dejando el descuido para las que tienen entre 36 y 45 años. 

Por edades y ya a nivel global andaluz, tanto las mujeres como los hombres con edades comprendidas entre los 18 y los 35 años son quienes obtienen mejores resultados en su balance hídrico. Por el contrario, el sector de población que supera los 55 años es el que aporta los peores datos del estudio.

“Normalmente, no damos a la hidratación la importancia que realmente tiene y nos cuesta ingerir la cantidad diaria de líquidos recomendada. Al margen de que ciertas enfermedades o medicamentos puedan alterar nuestros líquidos corporales, en la mayoría de la situaciones podemos reequilibrar nuestra hidratación con una ingesta de agua suficiente (2 litros en mujeres y 2,5 litros en hombres) y un adecuado consumo de sodio y potasio", explica Marta Gámez, Directora Técnica del Grupo NC Salud.

No sólo es importante tener líquidos suficientes en el organismo, sino que, además, deben estar adecuadamente repartidos en los distintos compartimentos corporales: el sodio y el potasio influyen de forma significativa en dicho reparto hídrico, de modo que lo ideal es consumir poco sodio y bastante potasio. "El sodio nos hace retener líquidos en forma de edema visible en tobillos, piernas y manos, mientras que el potasio nos ayuda regular la hidratación y eliminar el exceso. El sodio se encuentra en la sal, alimentos curados con sal, embutidos, quesos, snacks y platos precocinados. El potasio es abundante en verduras y frutas frescas”, añade la experta.

Tres situaciones de especial atención hídrica: al hacer un esfuerzo mental mayor, con ejercicio físico y al conducir

Si bien se recomienda que la ingesta de líquidos se reparta de forma equitativa a lo largo de todo el día, hay tres situaciones concretas en las que hay que prestar una atención especial a la hidratación. Es importante beber la cantidad de agua adecuada cuando se realiza un esfuerzo mental, como estudiar o trabajar, ya que el cerebro recibe un 20% del total del flujo sanguíneo, y si el cuerpo está deshidratado, el volumen de sangre, incluida la que alcanza el cerebro, se verá reducida. Además, existen evidencias científicas que corroboran que proporcionar al organismo la cantidad adecuada de líquidos reducirá la gravedad del dolor de cabeza, del cansancio y de la pérdida de concentración.

La deshidratación que se produce durante la realización de ejercicio físico debe prevenirse ingiriendo la suficiente cantidad de bebidas, antes, durante y después del esfuerzo. El rendimiento físico tiende a disminuir cuando la falta de líquidos supera entre un 1 y un 3% del peso corporal, por ello, es conveniente realizar el ejercicio a primera hora de la mañana o última de la tarde para evitar un aumento excesivo de la temperatura corporal causado por una reducción de la sudoración y del flujo sanguíneo, inducido por la deshidratación.

En tercer lugar, cuando se conduce, ya que el cuerpo se ubica en un espacio cerrado donde suele elevarse la temperatura y se puede experimentar un exceso de sudoración que implicará grandes pérdidas de agua y sales minerales, incluso con aire acondicionado si se trata de trayectos largos. Así, las bebidas sin alcohol durante el viaje ayudarán a reducir la fatiga en carretera.