Es probable que el éxito de la actual serie televisiva 'El Ministerio del Tiempo' se base en saber narrar al espectador de forma llana, directa y sencilla la profunda, abundante y complicada historia de este país, a base de capítulos que actúan a modo de intrahistoria en la que cualquier espectador puede verse reflejado. Con esa misma filosofía de fondo, la Universidad de Córdoba (UCO) y el Archivo Provincial de Córdoba, dependiente de la Junta de Andalucía, ha puesto en marcha una iniciativa con la que se quiere sacar a la luz el "riquísimo" bagaje documental de este organismo, pero acercando su contenido de una forma totalmente amena y popular a todos los cordobeses.
La actividad, bajo el muy sugerente título de 'Archivos del tiempo' va a ir mucho más allá de lo que actualmente pretende aplicar la Delegación de Cultura, Turismo y Deporte en Córdoba, que lidera Francisco Alcalde, con el 'Archivo del mes'. "La idea es formar un seminario permanente de divulgación histórica, pero no en un tono académico, sino de difusión de conocimiento para un público en general", ha explicado Antonio Díaz, subdirector del Laboratorio de Estudios Judeoconversos de la UCO, por completo implicado en este proyecto.
El Archivo cuenta con documentos registrados en los últimos 8 siglos, el más antiguo del año 1200
Lo principal es que tendrá un carácter permanente y estable, así como por completo altruista, ya que nadie va a cobrar ni un euro, ni siquiera los diferentes expertos que van a traer desde otros puntos del país, y se dividirá en un doble ciclo de primavera y de otoño. Para el primero de ellos se cuenta con la presencia del doctor en Historia por la Universidad de Granada, catedrático de Historia Moderna de la UCO y director del Laboratorio de Estudios Judeoconversos, Enrique Soria Mesa. ¿Su temática? Una muy curiosa persecución contra el vino de Montilla por parte de un lobbie de presión generado en el Ayuntamiento de Córdoba, que se negaba a que se vendiera este producto, a pesar de su contratada calidad, sólo porque no convenía a sus intereses en esos momentos. Será el próximo día 31, a partir de las 19.30 horas, en la sede del Archivo de la calle Pompeyos.
El resto de temáticas sigue la misma senda en materia de atractivo para satisfacer curiosidades prácticas. Tales como la falsificación documental, el mundo de los caballos andaluces o más concretamente de los caballos cordobeses, el Inca Garcilaso de la Vega o cómo se comercializaba con espadas en el mundo de los espadachines y la esgrima en la época que recrea Arturo Pérez-Reverte con su personaje el Capitán Alatriste.
Todo lo reflejaba un notario
El siguiente ciclo de conferencia, que también contarán con su propio especialista en la materia, versarán sobre minorías en Córdoba, los moriscos o cómo era ser un esclavo en el califato cordobés. "Nosotros lo planteamos con el triple y factible objetivo de difundir la investigación que estamos desarrollando desde la Universidad de Córdoba, poner en valor el riquísimo patrimonio documental que hay aquí y comunicar dos elementos generadores de cultura en la ciudad como es el Archivo Histórico provincial y la UCO, y darlo a conocer al público", ha abundado el profesor Díaz.
Todo ello con la condición de que en todas u cada una de las conferencias se hable de alguno de los documentos que hay en el Archivo y que se aprovechará para exponerlo al público mientras duren las conferencias, según ha añadido, por su parte, la directora del Archivo, Alicia Córdoba. "En nuestro Fondo de Actas Notariales tenemos una documentación interesantísima sobre la historia de Córdoba y su provincia que no es para nada aburrida, porque lejos de lo que nuestra cultura actual entiende que son las escrituras de un notario, en esas épocas se reflejaba todos los entresijos y las entrañas de la historia porque servían para todo, desde vender un burro, denunciar un adulterio o calificar la uva de donde procede un vino".
De hecho, otra de las conferencias versará sobre cómo se llegaba a contrata a un gran señor dueño muchos caballos para criar una línea de pura sangres a modo de sementales. Y es que el Archivo cuenta con documentos registrados durante más de ocho siglos, el más antiguo de los cuales está datado en el año 1200. Y desde entonces ya ha llovido y la historia da mucho de sí.
