La moda se encuentra presente en nuestra vida cotidiana, de alguna manera, siempre estamos pendientes de las tendencias de la temporada y procuramos adquirir prendas nuevas para mantener nuestro armario actualizado y destacar en toda ocasión.
Sin embargo, no muchos están al tanto de lo que ha significado a lo largo de la historia, la producción de textiles para la salud del planeta. La industria de la moda y todos los ámbitos que encierra, tienen un alto grado de responsabilidad en el daño que se le ha causado al planeta en términos de contaminación.
Es por eso que la misma industria, representada por grandes y pequeñas marcas, está haciendo lo propio por intentar resarcir tal daño y mostrar al usuario que hay otras alternativas de moda que se pueden adquirir sin que esto signifique darle un golpe bajo a nuestro principal y común hogar: nuestra madre Tierra.
Por tales razones, que están más que justificadas, muchas personas están teniendo más conciencia a la hora de adquirir nuevas prendas de vestir y apuestan por comprar ropa ecológica. De hecho, si seguimos hablando de tendencias y estilos vanguardistas, hay que decir que este tipo de prendas las estamos viendo con más frecuencia en pasarelas de alta moda y son la bandera de campañas publicitarias de afamadas marcas.
Por otro lado, ha dado cabida a nuevos emprendimientos y vemos con agrado como nuevas marcas, empresas e innovadoras tiendas emergen con esta propuesta, que busca resaltar la producción consciente y el trabajo digno de quienes se encargan de materializar estos productos.
Hay que decir que anteriormente, (y aún existe, ya que es deber de los gobiernos del mundo combatirlo) la moda estaba muy ligada a la explotación laboral. Personas con deficiencias económicas eran maltratadas con bajos sueldos y largas horas de trabajo, para producir textiles y prendas en masa.
Con el auge de la ropa ecológica, no solo se tiene en cuenta el uso de materia prima orgánica, sino también, esta corriente vela por las condiciones laborales de quienes se encargan de producirla, ofreciendo sueldos y salarios dignos, y mayores beneficios.
Este cúmulo de intenciones concretas abre paso a una nueva concepción de la industria de la moda, donde además, hay un gran respeto hacia el mundo animal, y los procedimientos artesanales son más valorados y apreciados por los consumidores.
Beneficios de comprar ropa ecológica
Con todas estas explicaciones previas, es lógico presumir que adquirir ropa bajo estos estándares sostenibles puede traer consigo excelentes beneficios, que no solo van en favor de la conservación del planeta, sino también a favor de llevar una vida mucho más saludable y armónica con nuestro entorno.
Un granito de arena por la causa
Por supuesto, uno de los principales beneficios de comprar ropa ecológica es que sentirás la satisfacción de formar parte activa de la suma de voluntades para reducir los daños que el hombre ha ocasionado en el planeta.
La ropa sostenible es fabricada respetando los procesos naturales de cultivo para obtener la materia prima ideal, como el algodón o la seda 100% orgánica, por ejemplo. Esto conlleva a la eliminación del uso de pesticidas y otras sustancias tóxicas para acelerar o aumentar la producción sin escatimar en el impacto ambiental.
Costes razonables
Es cierto que años atrás, cuando esto de la moda ecológica era muy incipiente, los precios de las prendas eran bastante elevados, lo que hacía que la alternativa de adquirirlas fuera una oportunidad que solo tenían las personas de mucho poder adquisitivo.
Pero gracias a la competitividad creciente en el mercado, y a la lógica de la oferta y la demanda, se ha logrado que los precios sean más asequibles y puedan estar al alcance de todo tipo de presupuestos. Además, el acuerdo entre tantas marcas que dominan la industria de la moda también ha conseguido que los procesos de fabricación sean más amigables, y la relación producción-rentabilidad sea conveniente, y por ende, el precio final de venta al público sea más razonable.
Beneficios para la salud
Es un hecho que la ropa ecológica, al no estar fabricada con sustancias tóxicas, es mucho más favorable para la piel. Es ideal para personas sensibles, porque no produce picores, alergias ni intoxicaciones.
