El precio de la electricidad es sin duda uno de los temas más comentados del año. Familias y empresas se enfrentan a un coste de la luz que pone contra las cuerdas la economía familiar y que ahoga a las empresas que ven afectada su rentabilidad. La puesta en marcha de medidas para paliar esta subida escalonada e imparable, parece no estar ayudando a bajar la factura, como podemos ver en el precio kw hoy.
Lo cierto es que los datos demuestran que la aplicación de un tope al precio del gas, una medida puesta en marcha por el gobierno conjuntamente con el gobierno de Portugal, parece no estar dando sus frutos. E incluso, de momento, parece estar causando el efecto contrario, pues el precio de la luz ha seguido subiendo en las últimas semanas.
¿Por qué ocurre esto?
El gobierno pide a los consumidores y empresas paciencia hasta que el tope al precio del gas comience a dar resultados y se traduzca en una bajada de la factura de la luz, pero esta medida aún no la está notando el consumidor en su bolsillo. Esto ocurre por un elemento que no pasa desapercibido a la hora de calcular el precio de la luz: la compensación a las gasistas.
Hasta la entrada en vigor de esta reforma en el mes de junio, el precio de la luz se determinaba en la subasta eléctrica. Esto se ha cambiado desde que se le ha puesto un tope al precio del gas. Ahora, al precio de la luz hay que sumarle una especie de compensación a las empresas gasistas que tenemos que pagar los consumidores por establecer un tope al precio del gas.
Esto provoca el efecto contrario al que se pretendía con esta medida, pues de momento el precio final se ha visto incrementado. Esto es así porque el precio del gas en los mercados internacionales ha subido rápidamente, por encima de las previsiones del gobierno, así que si al precio de la luz en el mercado mayorista le sumamos la compensación a las empresas gasistas tenemos como resultados un precio de la luz más elevado que antes de la entrada en vigor de esta medida.
Las elevadas temperaturas también influyen en el precio
Otro factor que está influyendo en el precio de la electricidad es la elevada demanda que se está registrando debido a las altas temperaturas con las que hemos iniciado la época estival. Este mayor consumo, junto con la poca producción de energía eólica debido a la situación anticiclónica propia del verano, también parece estar detrás de que el precio de la luz no haya dejado de subir últimamente.
Los expertos afirman que todavía no saben cuándo vamos a poder notar en nuestra factura el mecanismo del tope del precio del gas. El gobierno insiste en que si el tope al gas, la factura hubiera sido más cara y los expertos afirman que, una vez la medida tenga efectos reales sobre la factura, la reducción puede ser de un 15% a 20%, una cifra pequeña comparado con el 80% del incremento del precio de la electricidad en el último año.
Afecta a ambos mercados
El precio de la electricidad actual afecta tanto a los hogares con tarifa regulada, a la que están acogidos un total de 11 millones de hogares en toda España, como a la tarifa del mercado libre. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha constatado que el pasado año, en el marco de la espiral alcista de precios de la electricidad, más de 1,25 millones de personas pasaron del PVPC o mercado regulado al mercado libre a precio fijo en un intento por ahorrar en su factura.
Lo cierto es que las subidas de precios afectan indistintamente a ambos mercados y que los consumidores tenemos pocas herramientas a nuestro alcance para tratar de escapar de esta subida constante de los precios de la electricidad.
Como se puede apreciar, el tope al precio del gas parece no estar dando resultados para reducir la factura de la luz, e incluso el precio de la electricidad ha subido después de la entrada en vigor de esta medida. Así que no es nada fácil predecir cuándo vamos a notar los consumidores un ahorro en nuestra factura gracias a esta medida.
