QUEJAS VECINALES

Los vecinos de La Axerquía dicen que el Casco Histórico se está convirtiendo en un parque temático

Se quejan de no ser consultados a la hora de organizar celebraciones y del incumplimiento de normativas en cuanto a la ocupación de la vía pública

CORDOBA. 13/02/2016. VIA CRUCIS DE LAS COFRADIAS CON EL CRISTO DE LA MISERICORDIA DESDE SAN PEDRO HACIA LA CATEDRAL. FOTO: ROLDAN SERRANO. CORDOBA HOY.
photo_camera Via crucis de las cofradías con el Cristo de la Misericordia desde San Pedro hacia la Mezquita-Catedral

La Asociación de Vecinos La Axerquía ha hecho patente su malestar por la situación que vienen soportando los vecinos del Casco Histórico y que ha tenido su ejemplo más reciente en la Semana Santa. Mientras hermandades y cofradías, Obispado, hosteleros y restauradores muestran su satisfacción por el desarrollo de la Semana de Pasión, quienes viven en la zona de la Axerquía recuerdan que el hecho de que todas las procesiones pasen por sus calles ha agravado la movilidad y la seguridad, por no hablar de la basura.

Así, los vecinos se quejan de que no se les haya consultado sobre las cuestiones que afectan a los barrios de la zona en una celebración tan importante y ponen en entredicho la apuesta por la participación ciudadana del Gobierno municipal.

Según la asociación, la Axerquía es “la zona de moda”. “Tenemos cruces, patios y cualquier sarao que nos quieran poner en La Corredera, motor turístico de la ciudad, sin ninguna contraprestación para la vecindad”, apuntan en un comunicado.

La Asociación de Vecinos afirma que los pocos aparcamientos como el de La Herradura “quieren convertirlos en rotatorio” cuando lo que tendría que hacer el Gobierno local es “pensar ya en una alternativa al aparcamiento al otro lado del río que diera cobertura al casco histórico y al turismo”, un turismo que, junto con los negocios, “invaden nuestras casas”, dicen y ponen como ejemplo la situación de la plazoleta de Paseo de la Ribera, cerca de la Cruz del Rastro, donde cohabitan tres negocios con veladores a los que ahora se ha añadido un puesto de caracoles “no dejando ya ni siquiera sitio por donde pasar, contraviniendo ordenanzas y quitando mobiliario urbano, en concreto un banco para que los vecinos pudieran sentarse”.

Micciones, botellón y música

Motos en las aceras, micciones en las esquinas de las casas, música en el puesto de caracoles, botellón en las escaleras de la plaza… este es el panorama con el que conviven los vecinos que tiemblan ya de pensar en el Mayo cordobés. “Ofrecemos nuestras casas, sin coste alguno, gratis, para que cualquiera de la clase política duerma por una noche y comprueben como son nuestros fines de semana y lo que son noches y noches sin poder descansar”, señalan.

Además, se quejan de lo que les cuesta mantener sus casas en el casco histórico, “lo que nos está suponiendo hacer frente a un IBI fraudulento aplicado ilegalmente, unas ITEs que no podemos asumir, invadidos por un turismo desaforado nada sostenible, los veladores y los disco-bar de tapas con música a tope (algo no permitido) no tienen límite”, lamentan y añaden que “parece que lo único que importa es que algunos se enriquezcan mientras la vecindad poco a poco va despoblando el casco histórico para convertirse en un parque temático sin alma, perdiendo toda la esencia de Córdoba, esa de la que tanto se nos llena la boca”.

Por todo ello, exigen al Ayuntamiento que intervenga para detener lo que consideran una “vergüenza” y que se les tenga en cuenta a la hora de programar actividades y tomar decisiones que afectan a los vecinos.