Andalucía Entre Tod@s ha planteado, a través de un comunicado público, que la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) debe actualizar el acuerdo alcanzado en consejo de Gerencia sobre la instalación de placas solares en el Casco Histórico, ya que el actual y vigente "no se refiere para nada a la instalación de placas fotovoltaicas de generación eléctrica, sino solamente a las de calor".
En esa actualización del acuerdo, "donde no se prohíbe la instalación de placas fotovoltaicas", sí tiene que quedar meridianamente claro "qué mecanismo se establece conjuntamente con Patrimonio Histórico de la Junta, que es la que realmente tiene la potestad de decir si las placas se pueden instalar o no, a través de un convenio marco para establecer un protocolo de instalación de las placas que toda la ciudadanía pudiera acudir a él a la hora de plantearse la instalación", ha indicado el portavoz, Manuel Ortega.
Eso, además, permitiría generar una especie de oficina conjunta o ventanilla única, donde se tramite toda la documentación al completo, en lugar de tener que presentar diversas documentaciones en lugares diferentes. Dicho de otro modo, sería "una oficina única donde dirigir las solicitudes de instalación de placas para que GMU y Junta las estudiasen y resolvieran allí mismo, y no tener ahora que presentarla en Urbanismo para luego pleitear con Cultura generando un conflicto".
Manuel Ortega ha incidido en la idea de que es el Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (Icomos) quien ha elaborado un informe-estudio sobre las placas solares y lo único que deja claro es que éstas no puedan producir contaminación visual. Por tanto, "habría que estudiar realmente en qué zonas se puede producir contaminación visual, porque, por ejemplo, hay muchos espacios en las casas que no se ven desde la calle, con lo cual esa contaminación no se produciría", ha abundado Ortega.
Además, a día de hoy, en el Casco se pueden ver azoteas y tejados "donde hay de todo sin ningún tipo de homologación ni de ordenación, con lo cual ya se está produciendo es supuesta contaminación visual y hay negocios que te ponen terrazas sin regular por el PGOU", ha advertido el portavoz de Andalucía Entre Tod@s.
Igualmente, ha señalado que en determinadas crujías de edificios y zonas en techados "esas placas solares no van a verse desde la calle, por lo que no generan un impacto visual tremendo ni dañino, máxime teniendo en cuenta que no se trata de colocar armatostes, sino elementos discretos".
Manuel Ortega ha recordado que la situación actual sobre las placas en el Casco Histórico es que no existe en la práctica prohibición alguna, puesto que se refiere única y exclusivamente a placas de calentamiento de agua, que las hay, a pesar de todo. Por tanto, al no hablar de las otras placas, las fotovoltaicas, "genera un vacío legal al respecto". Y dentro de ese vacío, la única cuestión existente es que Cultura ha establecido claramente en qué sitio se pueden poner placas y en qué sitios se considera que no se pueden poner.
"El Ayuntamiento hablaba sólo de que en las zonas renovadas se podrían instalar esas placas solares, a través de una declaración responsable, pero eso no es tampoco cierto, porque si en las zonas renovadas, que son escasas, hay elementos BIC también habría un impedimento y posiblemente eso sea lo que ha sucedido con el Ayuntamiento, que no ha podido instalar todo el conjunto de placas que pretendía".
Por lo tanto, Manuel Ortega plantea una reflexión: "¿Realmente se produce contaminación de las placas solares con las nuevas tecnologías que hay actualmente, y que no son las de tejas, que son extremadamente caras? Eso tendría que determinarse en un trabajo conjunto entre Patrimonio y Urbanismo, a través de una mesa conjunta, donde estuvieran las dos administraciones, y donde igualmente participara el movimiento asociativo vecinal, para determinar ahí qué pautas se pueden seguir, porque no se trata de decir no a las placas, sino a las que generen impacto visual".
Por lo pronto, Manuel Ortega ha señalado que en 2022 Icomos elaboró una 'Guía de buenas prácticas para la instalación de infraestructuras y equipamientos relacionados con las energías renovables y su potencial afección al Patrimonio Cultural'. En esa guía se habla e la necesidad de llevar a cabo una evaluación de impacto patrimonial, que "aquí no se ha hecho, por lo que, como siempre, vamos tarde y mal en estas cuestiones, cuando en el resto de Europa lo tienen muy avanzado".
En cuanto a si las placas salen más caras o baratas, incluso, el portavoz de Andalucía Entre tod@s ha señalado que se pueden aplicar bonificaciones en el IBI, al tiempo que existen "un montón de subvenciones de fondos europeos, los Next Generation entre ellos, que igual que impulsa comunidades energéticas podrían impulsar la instalación de placas en el Casco Histórico, siempre que no supongan contaminación visual en detrimento de los BIC y de lo que la Unesco pudiera estimar que fuera dañino para el patrimonio".
A modo de resumen, Manuel Ortega plantea sentarse en el seno de un marco preestablecido y dentro de un grupo de trabajo, ir estudiando y validando las propuestas. "Se podría, incluso, trabajar de la mano de personal de Icomos, para que pudiéramos dejar ya establecido para siempre qué tipos de elemento se puede colocar o no como placas solares dentro de la gama que hay".
Ortega ha señalado también que "si nos ponemos a hablar de impacto visual en el Casco que no cumplen los preceptos del Pepch podríamos estar cerrando muchos chiringuitos simplemente por tener luminosos, cartelería y demás que incumplen la norma y generan contaminación visual".
En cualquier caso, Manuel Ortega ha incidido en que no se ha vuelto a hacer nada desde la reunión con el anterior presidente de la GMU, Salvador Fuentes, el tiempo pasa, no se resuelve la situación y los vecinos y vecinas siguen sin poder enfrentarse a la subida del coste energético.
