DISTRITO CENTRO

Colectivos vecinales del Centro exigen que se restituya el servicio pediátrico en Lucano

Lamentan que la Junta esté desmantelando el Servicio Andaluz de Salud en favor de la sanidad privada
Interior del centro de salud Lucano. FOTO ARQUITECTURA CONTEMPORÁNEA
photo_camera Interior del centro de salud Lucano. FOTO ARQUITECTURA CONTEMPORÁNEA

La Asociación de Madres y Padres del alumnado del Centro de Educación Infantil y Primaria (CEIP) López Diéguez y las asociación vecinales Axerquía, Galea Vetus, La Fuenseca, Santa Marina, Orive y Regina-Magdalena, así como otras familias de los barrios del Casco Histórico de Córdoba ven con una "gran preocupación" la interrupción del Servicio de Pediatría del centro de salud Lucano desde el pasado 30 de diciembre de 2021 hasta el próximo 11 de enero.

Según un comunicado de estos colectivos, remitido esta mañana a este periódico, la única alternativa que se les ha dejado para la atención sanitaria de sus hijas e hijos es que acudan a las Urgencias del Hospital Universitario Reina Sofía, en plena sexta ola y justo en uno de los peores momentos de la pandemia causada por la Covid-19.

Esta situación es debida a que la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía no está cubriendo las bajas por enfermedad o las vacaciones de unos profesionales tan necesarios e imprescindibles, que han demostrado su buen hacer y su gran implicación, habiendo conseguido incluso la certificación IHAN (Iniciativa para la Humanización de la Asistencia al Nacimiento y la Lactancia), fruto del trabajo de estos sanitarios en la promoción de la lactancia materna entre sus pacientes, por los grandes beneficios que conlleva para la salud de los lactantes y madres. Logro que lo ha situado como un centro de salud pionero y referente para la comunidad científica y, sobre todo, para muchas familias de la ciudad y que muy pocos centros sanitarios han conseguido en España.

"Para nosotras y nosotros, como madres y padres, como vecinas y vecinos, no son sólo unos profesionales, sino una parte más de la  comunidad, que colaboran en la crianza de los más pequeños y pequeñas de la zona. Personas que nos atienden con humanidad, cercanía y una gran profesionalidad. Sabemos que su trabajo los trasciende a ellos mismos y que han dejado su sello en el Servicio de Pediatría de nuestro querido centro de salud Lucano, tan reivindicado por la Asociación Vecinal Axerquía durante muchos años. Por lo que es nuestra obligación defenderlo y luchar por una Sanidad Pública de calidad, por nuestro derecho a la salud como ciudadanas y ciudadanos. Y por nuestras niñas y niños", señala la nota.

De todos modos, los firmantes del comunicado aseguran ser "absolutamente conscientes" de que esto que les ocurre en estos días no es un hecho aislado. Ya que, "como hemos podido comprobar, en varios centros de salud de Andalucía (Amate y El Cachorro en Sevilla, por poner algunos ejemplos)" también se han quedado sin el Servicio de Pediatría. Igualmente, se sabe que no se cubren las bajas por enfermedad de estos profesionales desde hace años y bajo gobiernos de distinto signo político, que existe una carencia estructural de profesionales en el resto de especialidades de la Atención Primaria, así como de personal de administración.

También se conoce que las citas cada vez son más lejanas en el tiempo y que la Administración y los usuarios y usuarias "nos hemos instalado en la normalidad de las citas telefónicas que limitan mucho la capacidad de diagnóstico sanitario. Incluso podemos entrever que hay una intención soterrada de la Consejería de Salud y Familias de fomentar el transvase de pacientes a la sanidad privada, cansados de listas de espera interminables y de la merma de la calidad de un Servicio Andaluz de Salud (SAS) cada vez más precario y escaso de recursos.

Los muchos datos que apuntan claramente a esas circunstancias son que la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía ha pasado de despedir a 8.000 sanitarios en noviembre de 2021 a recurrir a médicos jubilados y a aumentar la jornada laboral a los enfermeros para reforzar su plantilla solo dos meses después. Ésa es la decisión que se ha tomado tras quedar en evidencia que la estrategia de prescindir de aquellos profesionales no fue la más acertada, tal y como recuerdan los sindicatos.

Con la presión asistencial por las nubes, sobre todo en la Atención Primaria debido a la sexta ola de la Covid-19, el SAS se ve obligado a recurrir a la estrategia de contratos para paliar la falta de personal que padece.

Según la información que manejan en el sindicato de Enfermería Satse, así como en el Sindicato Médico, en la Atención Primaria de Andalucía faltan en total alrededor de 6.500 sanitarios. Mientras que la carencia de enfermeros alcanza los 5.000, los 1.500 restantes corresponden a médicos de cabecera y pediatras. También escasean los profesionales que se dedican a la gestión administrativa, aunque dar un número es difícil, según explican las fuentes sindicales.

La inversión en Sanidad de la Junta de Andalucía es la segunda más baja de toda España (solo por delante de Madrid) con un gasto de 1.388,86 euros por habitante, mientras que la media del resto de comunidades autónomas se sitúa en los 1.679,26 euros por habitante.

Por otra parte, la Junta de Andalucía, en manos de PP y Cs, ha aumentado un 43% en un año el presupuesto para externalizar la sanidad pública hacia la privada. De hecho, el nuevo decreto andaluz de simplificación aprobado hace unos días reduce los trámites para autorizar conciertos sanitarios con centros privados.

Frente a todo eso, estos colectivos exigen a la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía la inmediata restitución del Servicio de Pediatría en el centro de salud Lucano y en todos aquellos de la comunidad autónoma donde haya sido suspendido.

Igualmente se reclama el reforzamiento de la Atención Primaria del SAS y, por ende, de la primera línea de fuego de la Salud Pública.

También, una atención sanitaria digna y de calidad para la ciudadanía andaluza y, en especial, para la infancia que ha sido uno de los colectivos más perjudicados y que más han sacrificado en esta pandemia. "Ojalá nuestros responsables políticos estuviesen a la misma altura que han estado los más pequeños y pequeñas de nuestras casas, que nos han dado una auténtica lección a todos. Ahora toca cumplir con ellos, protegerlos, cuidarlos y nuestros pediatras son imprescindibles", remata el comunicado.