El nuevo Centro de Exposiciones, Ferias y Convenciones (CEFC) es ya una realidad tras casi una década de desarrollo del proyecto y de solventar las vicisitudes que ha tenido. Se trata de un edificio versátil con capacidad para albergar eventos de gran formato con capacidad para 5.000 personas sentadas, entre gradas y sillas.
Desde el pasado lunes, día 27, la obra esta fiscalizada y decepcionada, por lo que, en palabras del alcalde, José María Bellido (PP), el edificio "ya es de los cordobeses". Son en total, 6.846 metros cuadrados, repartidos en un espacio diáfano de 4.600 metros cuadrados en planta baja y otros 2.155 metros comerciales en la planta primera, "todo ello en una gran vitrina como es ésta que servirá para vender al mundo la ciudad", ha indicado, por su parte, el presidente de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU), Salvador Fuentes (PP).
Para hacerse una idea mental de su amplitud, sólo la plaza central del CEFC es superior a la superficie de la Plaza de Las Tendillas, y tiene, además, en subterráneo 637 plazas de garaje, que garantizan cierta tranquilidad para acceder hasta esa zona.
Finalmente han sido 13,6 millones de euros los invertidos de presupuesto para contar, como ha recordado Bellido, con el Centro de Exposiciones más moderno y versátil de España. Así, el gran atrio está pensado para conformar hasta 16 fórmulas diferentes de espacios en diferentes tamaños con la posibilidad de contar con gradas para 5.000 personas. Eso supone "contar con una versatilidad absolutamente competitiva para posicionarnos en los mercados nacionales e internacionales".
Para el alcalde, el día de hoy es de "plena satisfacción del deber cumplido y de alegría par rendir cuentas a los ciudadanos diciéndoles que estamos cumpliendo con lo prometido, que era poner a Córdoba a la altura que se merece", además de "ir cerrando una herida que tenía esta ciudad abierta desde hace más de dos décadas, que era la necesidad de contar con un gran espacio para celebraciones de gran formato". Una cuestión que ha tenido un muy largo recorrido, de como mínimo 20 años hablando del proyecto, nueve años desde que se comenzó a hablar de éste en concreto y tres años después de llegar PP y Cs al gobierno local, pero que ahora "la obra está concluida es un espacio de todos los cordobeses".
El regidor ha recordado que no ha sido un camino fácil y que en junio de 2019 se encontraron una obra "absolutamente parada, había pleitos con la antigua contratista, no había camino ni hoja de ruta a seguir para culminarla", pero ahora, tres años y medio después, "pese al estancamiento inicial, pese a la Covid y al encarecimiento del suministro de materiales, cumplimos el compromiso".
En este punto Bellido ha mencionado a todos los que han participado de la idea de un espacio como este, desde sus inicios cuando sencillamente se pensó en ello, hasta estos últimos días, "porque creo que también es parte de esas personas y hoy se tienen que sentir satisfechos", pero ha habido menciones espaciales para quienes han tenido su protagonismo en que esta obra se culmine.
Esas personas han sido nombradas por Salvador Fuentes en las figuras de los profesionales de la GMU, es decir Carmen Chacón, Rafael Ruiz y Luis Valdelomar; de los arquitectos que "han hecho que esto sea un edificio de mención en revista internacional y de premios seguros", Fernando Suárez y Javier Terrado y el arquitecto Técnico que es Víctor Bastán; y de la constructora San José como constructora, "que han sacado, junto a Carmen Chacón, cosas que eran impensables que iban surgiendo a medida que avanzaba la obra", desde que se firmó con la empresa el 28 de octubre de 2020. Desde entonces se han producido tres aplazamientos no achacables a la empresa, y hasta un incendio en la azotea. Y, aún así, se ha conseguido terminar no demasiado tarde.
TEXTO Y FOTOS: YOLANDA PEDROSA.
