Un año más arranca la Feria Internacional del Turismo, Fitur, donde Córdoba capital y provincia pretenden mostrar desde hoy y hasta el próximo sábado sus fortalezas de cara a un año en el que la Covid pueda dar un respiro al sector turísticos y por extensión al resto de los servicios.
En esta ocasión, la capital aborda desde el mediodía varios de sus platos fuertes, como son el reciente acuerdo con la Fundación Thyssen-Bornemisza Art Contemporary para que parte de una de las colecciones de arte contemporáneo mejores y más completas de España estén expuestas en el C3A y en otros puntos interesantes de la capital, con el aliciente de que los propios artistas vendrán a Córdoba para hablar de su arte.
Sin duda un enorme atractivo para un tipo de turismo cultural que se mueve durante todo el año y no sólo durante los meses de temporada alta, que en Córdoba es la primavera.
También hoy se saca brillo a la Semana Santa cordobesa, que este año vuelve a tomar las calles, con todas las medidas de seguridad posibles, que viene acompañada de la Exposición Córdoba Cristiana. Ya por la tarde será el turno de las principales joyas patrimoniales de la ciudad, ambas Patrimonio de la Humanidad, como son la Mezquita-Catedral, con el programa 'Abriendo verjas prohibidas', y el yacimiento palatino de Medina Azahara, la última catalogación de la Unesco, con lo que será una visita virtual.
Desde la provincia, entre tanto, hoy es un simple día de inauguración, contando con la presencia en el expositor de Andalucía del presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno (PP), pero mañana, jueves, será una jornada frenética, con hasta seis presentaciones.
Entre ellas están la de Córdoba singular, el programa de la Subbética Cordobesa, el proyecto Córdoba 360º, la presentación del Congreso Internacional de Turismo Cultural y los turnos del Guadajoz-Campiña Este y del Valle del Guadiato.
La intención de la capital, tal y como se avanzó en su día, es buscar fórmulas de interés para desestacionalizar las visitas, lo que redundará, sin duda, en el incremento de laas pernoctaciones, que es una de las asignaturas pendientes de la ciudad.
Por su parte, la provincia pretende ofrecer un destino muy seguro ante el problema de la Covid, donde prima la cercanía, la calidad y la excelencia.
En ambos casos, dos de los platos fuertes son, sin lugar a dudas, tanto el turismo de naturaleza, propia del interior, y, por supuesto, la gastronomía, con rincones de altísima calidad a lo largo y ancho del territorio cordobés.
