El zoo de Córdoba tiene nuevos inquilinos. Algunos como los cinco lobos ibéricos, los dos cocodrilos africanos enanos y los dos tigres de Bengala han llegado a su nuevo hogar desde el exterior. Otros, sin embargo, han nacido en el propio recinto cordobés en cautividad, como es el caso de la cría de ñu de cola blanca.
Para acoger la llegada de todos estos nuevos especímenes, el Ayuntamiento cordobés ha habilitado, durante los últimos meses, sus nuevas instalaciones para que se encuentren hoy en las mejores condiciones de habitabilidad.
Así, la concejal de Infraestructuras y Medio Ambiente, Amparo Pernichi (IU), ha informado que lo que se ha tratado es de "dar a estos animales una vida mejor, puesto que algunos han sido rescatados del ámbito privado como los circos donde no se encontraban en las mejores condiciones".
Los lobos, que tienen una línea genética perfecta, han venido del Parque Natural de Peña Escrita, en Almuñécar (Granada), en el marco del Programa Europeo de Cría en Cautividad (EEP), que coordina el Parque Zoológico de Barcelona.
Por otro lado, la pareja de cocodrilos enanos (que parece que se llevan como el perro y el gato) proceden del Zoo de Barcelona con los que "tenemos un convenio", puesto que "estamos muy bien valorados en materia de bienestar animal".
Los tigres de Bengala, madre e hija, proceden de un circo de Alicante. Una gestión que se ha realizado gracias a la intermediación de la Fundación AAP Primadomus, que ha visto en las instalaciones cordobesas un lugar adecuado para que estos animales lleven una mejor vida.
Especial cariño le ha puesto el Zoo de Córdoba a los nuevos ejemplares de burro que han llegado y que vienen a "devolvernos los valores tradicionales de la España en la que se utilizaban estos animales en las tareas del campo", ha señalado Pernichi, quien ha recordado que, actualmente, estos animales se encuentran en peligro de extinción.
Todo esto para dar a conocer a la sociedad cordobesa el zoo de Córdoba, que "sigue siendo un gran desconocido para muchos y que sólo recuerdan el zoo antiguo que se encontraba en muy malas condiciones". Ahora, el zoo cuenta con unas buenas instalaciones y una nueva vocación de reserva para animales que, de otra forma, "podrían estar en serio riesgo de desaparecer", puesto que muchos de los hábitats naturales de estos animales o han sido destruidos o se encuentran muy deteriorados.
