MARTES SANTO: Jornada de recogimiento e intimidad a la cálida luz de las velas
Avanza la Semana Santa sin temor a la lluvia ni miradas contemplando el cielo, porque todo se está celebrando bajo abrigo, en los templos con mucha más intimidad que en la calle, lo que puede implicar una fe mayor, si cabe.
Pero no deja de haber imagines expuestas, y numerosos hermanos, cofrades y fieles que acuden a venerar a los respectivos titulares, perfectamente preparados, con el mismo mimo, cuidado y amor que si fueran a exhibirse por la capital, a la luz de las velas que lo convierte todo en pacífica estancia en penumbras, como si cada instante fuera sólo de uno o una mism@.
Son segundos que se prolongan en silencio y que se saborean con más ahínco, sabedores y sabedoras de que se trata de una Semana de Pasión de ésas que van a hacer historia y de las que cuando se avance en edad y las cabezas se nieve o se queden peladas se podrá decir: "Yo estuve allí".
En esta ocasión ha sido el momento de la Sangre, el Buen Suceso, la Santa Faz, la Agonía, la Universitaria y el Prendimiento, cada uno en su templo y con sus respectivos actos de liturgia.
En el Santo Ángel de Capuchinos, la Sangre ha celebrado una santa misa de hermanos; en Santa Victoria, la Agonía ha expuesto a los titulares para su veneración y ha celebrado por la tarde un acto litúrgico extraordinario; en el Juramento de San Rafael la Universitaria ha celebrado una misa de hermanos y un rezo de Via Crucis; en San Juan y Todos los Santos de la Trinidad, la Santa Faz ha ofrecido a sus titulares para su veneración, han celebrado con carácter extraordinario un ato litúrgico penitencial con celebración de una misa, con exposición del Altísimo, rezo del Via Crucis y el rosario, tras lo cual las puertas se han vuelto a abrir para una nueva veneración.
En el Santuario de María Auxiliadora han estado expuestos de forma extraordinaria el día de hoy las imágenes de Nuestro Padre Jesús Divino Salvador y Nuestra Señora de la Piedad. Además y durante la jornada se han estado celebrando otros actos como el rezo del rosario, una lectura de la Palabra para los más pequeños, el rezo del Via Crucis y una solemne eucaristía de hermandad.