Córdoba CF

Un león para rugir en El Arcángel

La afición está más que preocupada con la situación de un equipo a la deriva, que afronta una segunda vuelta con pánico al descenso. La mayoría echa la culpa a los expresidentes por no haber vendido antes para invertir en una solución sobre el terreno de juego

aficion
photo_camera La afición del Córdoba CF, aunque muy crítica, no deja de ser una de las más fieles de este país

"Mientras los números no digan lo contrario, el Córdoba CF puede salvarse". Ésta es la frase que los más optimistas deben utilizar para pensar en que el equipo cordobesista permanezca en Segunda División. Los guarismos no invitan a soñar, tras llegar al ecuador de la temporada, son ya tres los entrenadores que se han sentado en el banquillo de El Arcángel esta temporada. Luis Carrión, Juan Merino y ahora Jorge Romero. Lo que han conseguido en conjunto son cinco victorias, cuatro empates y catorce derrotas. 

En comparación con el año pasado, cuando Luis Carrión dirigía el plantel blanquiverde, los números varían sobremanera: Seis victorias, ocho empates y ocho derrotas. La pasada temporada quien marcó la salvación fue el Alcorcón CF, con 50 puntos, y en esta segunda vuelta el Córdoba CF, con 19 puntos, debe conseguir como mínimo 31 puntos para llegar a esa misma cifra.

Aunque los que salgan al campo son los jugadores, parte del problema radica en la cúpula del equipo. La mecha que se encendió con los González en la presidencia en el verano de 2011 agonizaba desde hace unos meses. El pasado sábado 20 de Enero y tras varias reuniones entre Jesús León y Carlos González se confirmaba la venta del Córdoba CF. En concreto, el empresario montoreño, Jesús León (Aglomerados Córdoba) adquirió el paquete accionarial (98%) del conjunto califal tras el pago de 8`5 millones de euros a Carlos González (Azaveco).

 

pañoletada grada

 El sustento real de la mayoría de equipos suele ser de sus socios y abonados, y ahora mismo la opinión del cordobesismo no es halagüeña con respecto a la posible salvación del conjunto califal, si uno se remite a los números de esta temporada. Qué mejor manera de expresar el sentir de la afición que escuchar a viva voz qué impresiones tienen para la segunda vuelta, cuyo camino parece sea más de espinas que de rosas.

En pleno centro de la capital, en el restaurante de la Federación de Peñas Cordobesistas el ambiente es bastante tranquilo. Kiko Serrano, que atiende al personal detrás de la barra reconoce su desconocimiento por la marcha de Jorge Romero. "Como entrenador no le conozco pero al menos es joven y tiene otras ideas. Por muy buen entrenador que dirija la plantilla ésta debe adecuarse a la división en la que juega”. Otro tema candente es quién debe asumir la culpa de la situación de este club, para Kiko, hay un nombre propio “El culpable de esta situación es Carlos González, por la gestión realizada”.

En alusión a una posible salvación del equipo blanquiverde, se pronunció alto y claro al señalar que "la salvación es inviable ahora mismo. Tiene que venir un entrenador muy bueno y jugadores a la altura para que se pueda mantener".

Para revertir la situación es comprensible que los problemas se deban resolver a través del diálogo y, aunque parezca un discurso político, debe haber un resquicio al que acogerse para dejar de pensar en el desastre.

José Manuel Prieto, otro de los presentes en el restaurante, se deshace en críticas ante la situación del Córdoba CF. "La confianza es nula hacia el entrenador, pero los jugadores han sido los responsables máximos de la situación que está arrastrando el equipo", señala. En contraposición a lo que expone José, desde la Peña Pasión Infinita, Francisco declara que "Jorge Romero es un entrenador que se está ganando el respeto de la afición porque ahora se juega". 

Pero tampoco la directiva se salva. "Tras el ascenso a Primera División, la directiva podría haber adaptado la plantilla a la categoría en la que estaba el club. La solución no es ni la salvación ni el descenso, es dejar que finalice la temporada y planificar la que viene con la ilusión de que otro presidente coja el timón desde primera hora. El fallo de los últimos años para este cordobesista es que "al realizar buenos fichajes, su posterior venta ha sido mala, es el caso de Dubarbier, Ximo Navarro, entre otros".

Tras la venta del Córdoba CF, González prometío que nadie de los jugadores saldrían, pues Jaime Romero fue uno de los primeros en salir junto a Pinillos. El primer caso, una inversión suculenta hacia un jugador que prometía pero que no ha tenido la oportunidad de demostrar su buen fútbol. En la Peña Pasión Infinita sita en la Calle Sagrada Familia, Francisco manifestaba que “desde las primeras jornadas dejó de seguir al equipo por la mala gestión del ex presidente actualmente con el máximo accionista piensa que lo importante es fichar”, pero a quién, en este caso "se debe fichar a un lateral izquierdo y a un central experimentado. Jaime Romero podría haber sido un jugador importante para la segunda vuelta".

PEÑA PASIÓN INFINITA

Kiki, dueño de la Peña de Pasión Infinita, al hilo de lo que comentaba Francisco, le espeta que "haría falta un central y además dos o tres refuerzos más para tener un buen fondo de armario". Esta opinión se sustenta con una premisa cuanto menos preocupante: El Córdoba CF lleva encajados 41 goles, y es el equipo más goleado en la Liga 123.

En el barrio de la Fuensanta, en el bar Cordubenses, Rafael Guerra, quien lleva siendo socio 21 años, a pesar de lo que se está viviendo, asegura que seguirá al equipo. "Los jugadores tienen la llave para ilusionar de alguna manera a la afición, pero anímicamente no están a la altura este año".

A cualquier aficionado asiduo a ir hasta El Arcángel piensa que el expresidente, Carlos González,  no ha invertido lo suficiente para reflotar el club. En este aspecto Rafael manifestaba que "el 95% de los aficionados pensará que la solución está en vender el club, una vez hecho, invertir en 4 o 5 jugadores y hacer una segunda vuelta a la altura del Córdoba de Paco Jémez". Con un carné de socio expedido hace 21 años y viajando a todas partes allá por donde fuera el club, "años como éste no recuerdo ninguno, el sentimiento es de apatía hacia el club".

BAR CORDUBENSES

Ante estos argumentos de este socio, qué debe hacer el equipo blanquiverde. El respaldo al entrenador es total, los jugadores levantan cabeza de acuerdo a lo visto en las últimas jornadas, tal y como señalaba Paco en la Peña Pasión Infinita, "el cordobesismo, y en alusión a las Peñas, se confía en que el Córdoba CF se salve. El presidente y el entrenador pueden hacer que el equipo resurja de sus cenizas".

Desde otro punto de la urbe andaluza recibe a Córdoba Hoy en su bar El Arcángel Fernando Hernández, quien es fiel a un escudo cada fin de semana, con su bandera y fotos del Córdoba CF llenándolo todo. La confianza la deposita en Jorge Romero, y de él dice que "es un buen entrenador, pero lo que hace falta es que los jugadores pongan de su parte". Todas las miradas apuntan a Carlos González como culpable de esta situación, él barruntaba que "todo el mundo que escucho culpa al expresidente por no haber invertido ni fichar jugadores". Sobre los jugadores también apuntaba "son buenos, pero hay que estar rodeados de calidad".

bar arcangel