Este jueves 4 de octubre, a las 20:00h en el Molino de Martos, Biocórdoba, en colaboración con EMACSA, realizarán la primera cata de agua de Córdoba, «la ciudad del agua». El chef Daniel Pla y el nutricionista Rafael Moreno Rojas realizarán «la ficha de cata» del agua de Córdoba, cócteles de agua, decorarán el agua, conversaremos sobre su origen, calidad, lugar en el protocolo de mesa, importancia en la nutrición, presentación en la restauración, posibles maridajes, cambio de la cultura del agua, implicaciones sociales y medioambientales…
Córdoba es la ciudad del agua y solo con el agua se puede entender su historia. El agua despierta pasiones, genera conflictos y es el bien más preciado. Las infraestructuras aparecen en nuestra ciudad desde la antigüedad. Las fuentes organizan el territorio y la ciudad: en su entorno, suele aparece la plaza. El agua de Córdoba proviene del embalse de Guadalmellato, que se abastece de tres afluentes en pleno corazón de Sierra Morena: los ríos Guadalbarbo, Varas y Cuzna.
La gran calidad del agua de grifo de Córdoba se debe, en primer lugar, a la calidad del agua bruta del embalse totalmente preservado de agresiones urbanas, agrícolas y ganaderas. Los terrenos graníticos de Sierra Morena posibilitan una escasa presencia de sales y una baja concentración de calcio y magnesio que determina su baja dureza.
Se puede considerar agua “de mineralización débil”. Por otra parte, el novedoso tratamiento de la Estación de Villa Azul utiliza esterilizantes que no transmiten al agua ningún olor ni sabor y permite que el agua de Córdoba no contenga cloro libre residual. El emplazamiento de la estación posibilita que más del 90% del agua circule por gravedad y no requiera de ningún sistema de bombeo, potenciado el ahorro energético.
