El consejero adelanta los datos

Los presupuestos autonómicos contemplan la contratación de 1.800 trabajadores sanitarios

Jesús Aguirre además ha respondido a la denuncia del sindicato UGT acerca de los contratos eventuales
Médico de atención primaria

El consejero de Salud de la Junta de Andalucía, Jesús Aguirre, ha adelantado que los nuevos presupuestos de la Junta de Andalucía -que se presentarán esta tarde-, contemplan la contratación de 1.800 trabajadores para el Servicio Andaluz de Salud, a los que hay que sumar, como ha indicado, los 2.750 que ya se contrataron con los últimos presupuestos. Aguirre ha respondido así al sindicato UGT, que indicó por boca del secretario de Salud, José Juan Fernández que consideraba falso el anuncio de la eliminación de contrataciones de personal sanitario por días o por semanas. "No hay ningún contrato al 70%, ya no veréis ninguno al 50,  ni de lunes a viernes, esos contratos de interinos vacantes han pasado a interinos, ya no están eventuales", ha afirmado Aguirre.

El consejero ha explicado que los contratos que por ejemplo se hacían al 70% de la jornada durante cuatro o cinco días han pasado a ser contratos de seis meses. "Luego hay un volumen de contratos que se hacen por bajas, vacantes, planes vacacionales o incluso los de lista de espera cuando está pasada la lista de espera, que son contratos finitos por equis tiempo", ha añadido Aguirre para señalar que en septiembre sí que han concluido algunos contratos del tipo relacionado con vacaciones o con listas de espera. "Esos son contratos eventuales, pero todos los contratos estructurales son ahora de seis meses, lo hemos conseguido, lo que no se verán son los contratos que había el año pasado".

UGT sin embargo mantenía que en Córdoba persistían los contratos eventuales, e incluso los de un día en algún centro de salud. Y que igualmente continuaban los de menos de seis meses, aunque sin concretar casos, salvo el del distrito sanitario Córdoba Guadalquivir, donde el sindicato denunciaba que puestos ofrecidos por la bolsa de trabajo quedaban finalmente suspendidos. UGT incluso amenazaba con llevar el asunto a los tribunales.