Piden mucha más seguridad en la calle

La Plataforma Carril-Bici celebra sus 25 años y el Día de la Bicicleta con minimarchas por la ciudad

Su coordinador en Córdoba, Julián Blanco, señala que es un acto reivindicativo para que instalen cuanto antes los ciclocarriles y que en lugar de ser provisionales acaben siendo permanentes
Fiesta de la bicicleta 2019 6
photo_camera Fiesta de la bicicleta de 2019

Día Internacional de la Bicicleta. Propicio para reivindicar el papel de este vehículo que no contamina, saludable y silencios para una ciudad asequible y amable para su uso y que con el confinamiento se ha visto literalmente liberada de contaminación y tráfico molesto.

Eso es lo que hay previsto para esta tarde, a partir de las 20.00 horas en diferentes puntos de la capital donde la Plataforma Carril-Bici ha hecho un llamamiento a los habitantes de Córdoba para hacerse ver en la calle cabalgando sobre sus vehículos en grupos de no más de 15 personas y formando cadenas de bicicletas tanto por carriles-bici ya existentes, como por aquellos espacios que van a pasar a ser ciclocarriles, algo más de 20 kilómetros, en grandes avenidas y donde hay más tráfico habitualmente.

"Pero el caso es que todavía no han pintado nada en esos carriles ni los tienen preparados para la llegada de la Fase 3 de la  desescalada", advierte Julián Blanco, coordinador de la Plataforma, quien ha indicado que estos paseos son también reivindicativos en ese sentido. Eso "y que no se les ocurra tampoco recortar la cifra de kilómetros, porque tenemos constancia de que hay presiones para que eso ocurra".

Limitados a 30 kilómetros

La fórmula para evitar esa vuelta atrás y a la contaminación excesiva es, en opinión de Blanco, "sacar la bicicleta y ocupar en abundancia esos carriles en los que van a estar limitados a 30 y que van a indicar preferencia para bicicletas y otros vehículos de movilidad personal, como es el caso de los patines eléctricos. "Si empiezan a ver que es muy utilizado, no van a tener más remedio que hacer que algo provisional pase a ser permanente", señala.

Entre otras cuestiones , porque "si algo tenemos claro en la Plataforma es que la acera es para los peatones y lo que pretendemos es seguir usando la calzada". Para ello, el ciclista necesita dos cosas: sentirse seguro, compartiendo el carril con un "tráfico amaestrado", y contar con aparcamientos de bicicletas seguros al llegar a sus destinos en la ciudad.

"Se da el caso que organismos como la Diputación, la Gerencia de Urbanismo o la Universidad de Córdoba tienen grandes extensiones que incitan al uso del turismo, pero apenas tienen algo que asegure y dé cobijo a una bicicleta para resguardarlas de las inclemencias del tiempo". Y eso echa para atrás a más de uno para su sus. De hecho, cuando llueve no es raro contemplar manillares y sillines cubiertos con bolsas de plástico. 

"Hay ciudades en España, como Vitoria o Sevilla, donde el uso de la bicicleta esta´realmente extendido y las administraciones ha tenido que actuar para compatibilizar el tráfico rodado con ella bicicleta, incluso en países donde el clima es mucho menos benigno que aquí", señala Julián Blanco. Córdoba, en este sentido, es "una ciudad ideal para su uso y sólo habría que facilitarlo".

El coordinador es claro en este sentido: "La bicicleta es parte de la solución, no la solución, a enfermedades y muertes provocadas por la contaminación y, por supuesto, carece de ideología, porque no es ni de izquierdas ni de derechas, pero sí es muy recomendable para nuestra salud a nivel de ejercicio y de contaminación".

Es más, la idea es que "nos podamos disolver como Plataforma porque hayamos llegado a nuestro objetivo", señala Blanco como su máxima aspiración, aunque sea irónico, pero "nos constituimos este año hace ya 25 años y seguimos casi en las mismas que entonces".