EL JOVEN DESAPARECIO EN JULIO DE 2015

A juicio un acusado de ofrecer pistas falsas sobre el desaparecido Francisco Molina

La Fiscalía pide para él penas de 14 meses de cárcel y el pago de una indemnización de 6.000 euros por daños morales.

Molina
photo_camera Los padres del desaparecido Paco Molina

El Juzgado de lo Penal número 4 de Córdoba prevé celebrar el día 9 de noviembre un juicio a un hombre acusado de un delito contra la integridad moral, después de que supuestamente ofreciera a los padres de Francisco Molina, el joven desaparecido en Córdoba desde julio del año 2015, pistas falsas sobre su paradero. La Fiscalía pide para él penas de 14 meses de cárcel y el pago de una indemnización de 6.000 euros por daños morales.

Según señala el Ministerio Público en su calificación, a la que ha tenido acceso Europa Press, el procesado presuntamente realizó tres llamadas al móvil del padre, Isidro Molina, desde una cabina telefónica de una avenida de la capital cordobesa el día 26 de julio del año pasado, días después de cumplirse el año de la desaparición.

Al respecto, el fiscal apunta que el acusado, "a sabiendas de que crearía falsas expectativas en Isidro, en las tres llamadas realizadas, a las 1,34, a las 16,14 y a las 23,00 horas, le proporcionó informaciones falsas sobre el paradero del menor".

En este sentido, le hizo creer que había conocido a su hijo "dos meses atrás en Albacete, donde el menor vivía en un local de alterne, y que habían viajado juntos hasta Peñíscola" (Castellón). Le dijo, además, que al menos hasta el día 21 había permanecido el menor en esa localidad, "que se encontraba bien, que pedía en la calle y que últimamente estaba con una chica con la que tenía pensado trasladarse de localidad".

En la última llamada, invitó al padre a verse personalmente para aportarle más información que "no podía facilitar por teléfono". Isidro, sin embargo, no aceptó, después de que la Policía "se lo desaconsejó al no poder garantizar su seguridad". Ante esto, quedaron emplazados para una nueva comunicación, que ya no llegó a producirse.

En opinión del fiscal, las informaciones ofrecidas por el varón "alimentaron las esperanzas de los padres de poder encontrar a su hijo con vida", pero una vez que la Policía hizo investigaciones para comprobar la presencia del menor y del acusado en las localidades mencionadas, "con resultado negativo", quedaron "sumidos en un estado de desolación y desesperanza".