La docencia sigue siendo su oficio, la costura una de sus incontables aficiones y, desde mayo de este año, la política su dedicación. La declaración de intenciones no es rompedora, "hacer una política diferente", pero sí quizá la forma de plantearla. Cristina Pedrajas es el fichaje que los cordobeses hicieron en las últimas elecciones municipales para la alineación de Capitulares como portavoz de Podemos Córdoba.
¿Cómo se produce el salto de profesora de Secundaria a la primera línea de la política local?
Siempre he sido una persona preocupada por los asuntos sociales y los problemas de los demás. Es por ello por lo que opté por la enseñanza, porque es una forma de ayudar a lo jóvenes. A mí nunca me había preocupado la política, pero en el origen de Podemos, tanto mi marido como yo vimos algo nuevo e ilusionante y creímos que era el momento de aportar nuestro granito de arena. Dimos el paso y entré en el Consejo Ciudadano, cuyas primeras reuniones fueron en el comedor de mi casa. Pero en esos momentos ni me planteaba ir en una lista electoral.
Cuando mi marido falleció, los compañeros estuvieron esperando a que yo recuperase un poco el estado anímico y después me fueron invitando a participar de forma más activa, me fui dejando y aquí estoy ahora.
Lo de las reuniones en el comedor de casa parece muy del espíritu asambleario con el que surgió la formación morada. ¿Qué queda del mismo?
Evidentemente Podemos se ha jerarquizado, pero por necesidad. Una estructura es necesaria para organizar a tantas personas como colaboran en este partido. Lo que queda de los orígenes es la frescura y la ilusión por que la sociedad pegue un giro en asuntos tan necesarios como el cambio climático. Ha habido algunas desilusiones en el camino y todo es un poco más complicado, porque cuando se llega a las instituciones las personas también 'nos quemamos'.
Y ahora que están en las instituciones, ¿es lo que esperaba?
Lo cierto es que sí, porque tengo muchos amigos y amigas que ya estaban en política desde hace bastante tiempo y en partidos muy variados. Lo que me contaban es, por desgracia, lo que estoy viendo en día a día, así que no me he llevado muchas sorpresas (risas). Pero sí, desde luego no es lo que me gustaría.
Cuando se llega a las instituciones, las personas y los partidos 'nos quemamos'
Los primeros días en el Ayuntamiento servirán para familiarizarse con un nuevo mundo de burocracia que la mayoría de ciudadanos no conocen...
En esos primeros días, no eres ni consciente de lo que es la burocracia (risas). Yo me sentía como un niño que llega al colegio por primera vez: estás aprendiendo y localizándote. También descubres realidades como que los espacios que te adjudican apenas son salubres y de que no tienes capacidad de hacer muchas de las cosas por las que tienes ilusión. Vas chocando con unos muros de hormigón como que eres oposición y tu forma de alcanzar logros es muy diferente; y por otro lado un sistema burocrático que, por lo que me cuentan, es especialmente complejo en Córdoba, particularmente.
La digitalización no ha llegado, estamos como en la Edad Media. Un informe puede tardar en llegarte un mes y medio, por lo que para cuando lo tienes el problema ya ha ido a más. Eso, por otro lado, obliga a llegar a acuerdos con el resto de compañeros concejales para conseguir pequeñas cosas. Yo a veces me conformo con eso.
¿Cuál ha sido la última de esas pequeñas cosas?
A veces son cosas tan simples como que unos vecinos te comuniquen que en su calle llevan varios meses sin iluminación y tú con una llamada telefónica al delegado de Infraestructuras consigas que tenga a bien atender esa demanda, envíe un operario y se resuelva la situación. Esa gente después te lo agradece.
No nos hemos colgado ninguna medalla con eso, pero es que no he venido aquí para eso.
El Ayuntamiento de Córdoba sigue en la Edad Media desde el punto de vista de la digitalización
Hablando de medallas... Los primeros meses del nuevo ejecutivo municipal han estado protagonizados por un constante cruce de acusaciones entre el equipo actual y el anterior. ¿Cómo se ha vivido esto desde Podemos?
Como un partido de tenis: Sentados en la grada. Se han encontrado gestiones mal hechas o incluso sin comenzar por parte del gobierno anterior y el nuevo gobierno pasa el día echándolo en cara. Nosotros no estábamos ahí antes y lo que podemos hacer es intentar ser constructivos.
A unos y otros les hemos dicho que estamos para echar una mano y colaborar, aunque tengamos que hacer oposición para defender aquello en lo que creemos.
La situación de enfrentamiento se ha incrementado ahora que vamos a elecciones generales. Todos vamos a elecciones, pero quizá hay grupos que desde el plano municipal lo concebimos de forma más relajada.
Ya que saca usted lo de las elecciones, no nos resistimos a preguntarle: ¿Confiaba en un pacto entre PSOE y Unidas Podemos?
Obviamente, sí. Creo que no habrá casi nadie en el país que no tuviese esa esperanza, porque el bloqueo no es positivo para España, pero las cosas suceden por algo y ahora lo que tenemos que hacer es colaborar en la medida de lo posible.
A esta convocatoria se incorpora una nueva formación, Más País, que nace en parte como escisión de Podemos. ¿Está la izquierda fracturada?
Yo creo que todo aquél que quiera presentarse a unas elecciones está en su derecho, tenga el recorrido político anterior que tenga. Mire, yo creo que la izquierda siempre ha estado fragmentada y siempre lo estará. La derecha también, aunque menos, porque en la izquierda tenemos más libertad de pensamiento, opinión y debate interno.
Pero no tengo ningún temor con esto, son los ciudadanos quienes deben decidir qué les gusta más.
Teresa Rodríguez ha intentado unir en todo momento, aunque finalmente no podamos ir todos bajo una sola firma
Pero incluso desde Andalucía, algunos miembros de su formación han planteado otros modelos de candidatura...
Yo estoy en el plano municipal, no sé si debo opinar tanto sobre política nacional o autonómica. Lo que tengo entendido es que Teresa Rodríguez ha intentado unir en todo momento, pero no ha sido posible. Ojalá en toda Andalucía hubiéramos podido ir bajo una sola firma.
En Córdoba, la izquierda también podría haber estado más fragmentada hasta que una sentencia judicial impidió a Ganemos concurrir a las elecciones de mayo. ¿Ha logrado Podemos capitalizar a ese electorado?
La relación con Ganemos es buena, en todo momento he sentido que éramos aliados en una misma causa, más todavía cuando dejaron de representar un adversario político. Cuando no se les permitió presentarse, tendimos la mano para llevar adelante su programa y el nuestro. Dentro de Ganemos tengo muy buenos amigos y el momento de rabia y frustración ha pasado ya para ellos, por lo que estamos encantados de llevar adelante muchas de sus propuestas.
¿El votante de Ganemos es el mismo que el de Podemos?
Yo creo que sí.
Quiero pensar que cierta falta de transparencia del equipo de gobierno es por carecer de tiempo para estar informando constantemente, pero claro que reclamaré que se nos tenga en cuenta
Han pasado los cien primeros días del nuevo gobierno que integran Partido Popular y Ciudadanos. ¿Se sienten escuchados desde la oposición?
Creo que se nos escuchaba más al principio. En las últimas semanas vemos cierta falta de transparencia y hay cosas de las que se nos avisa en el último momento. Incluso hemos tenido que pedir algunas reuniones extraordinarias para estar al día sobre algunos asuntos de ciudad de lo que nos enteramos por la prensa.
No obstante, esta misma semana por ejemplo, Isabel Albás (Cs) se comprometía con el resto de grupos a informar con mayor regularidad al resto de formaciones para recopilar nuevas ideas. Así que espero que eso cambie y se nos tenga más en cuenta, aunque entiendo que el equipo de gobierno tiene que estar gestionando a buen ritmo y el tiempo no siempre se estira tanto como para informar constantemente. Quiero creer que es esa la causa.
La última propuesta que llevaron a Pleno, con la intención de combatir el sinhogarismo, casi logra la unanimidad, pero Vox se bajó del barco porque, aseguraban, "se les estaba imponiendo un criterio de género cuando las personas sin hogar son hombres y mujeres, sin diferencia entre ellos". ¿Pensaron ceder en algún momento y eliminar ese punto?
Vox expuso dos motivos para abstenerse, que debe quedar claro que no votaron en contra. En primer lugar, quería que constase en el texto la palabra "religiosa", porque nombrábamos a fundaciones y asociaciones que trabajan con personas sin hogar y entre ellas se encuentran algunas como Cáritas, entre otras. Cuando Cáritas trabaja con el sinhogarismo los hace desde el punto de vista social, que se trata de una organización religiosa va implícito en la misma fundación de éstas. No considerábamos necesario mencionarlo.
Sobre el tema de género, es que lo considerábamos fundamental: Si para un hombre es durísimo vivir en la calle, para una mujer lo es mucho más. Si escuchas a los profesionales que están en contacto con estas mujeres conocerás que son violadas constantemente por el hecho de ser mujeres. Si esto no es un problema de género, ¿qué lo es?
Yo entiendo que a nivel humano, en su foro interno, reconocen esta problemática. Pero bueno, ellos tienen un programa con ciertos eslóganes que tienen que repetir constantemente porque si no, no serían Vox.
Comentaba que llegar a Capitulares era como entrar a un colegio nuevo. ¿Qué tal con sus nuevos compañeros de clase?
Yo me llevo muy bien con todo el mundo, la verdad. Vengo de ejercer durante 31 años una profesión donde no hay competencia. En un claustro de profesores hay compañerismo y así es como tengo programado mi chip mental. Vengo ofreciéndome a colaborar, tengo el teléfono de prácticamente todos los concejales y cualquier cosa que pasa en el día a día les escribo para conocer la situación de primera mano. Me tomo un café con cualquiera de ellos, aunque en el momento de debatir los temas en el Pleno tenga que debatir y discutir lo que haga falta.
