La ciudad

Una ciudad plagada de olvidados 'esqueletos urbanos' cada vez más deteriorados

En esta muestra de 'esqueletos urbanos' en la capital cordobesa estaba previsto en principio añadir el antiguo Pabellón de la Juventud de la Avenida de Cádiz, pero tras lustros de abandono y cierre, sus muros han desaparecido por fin (el derribo se inició este mismo mes) y ahora sólo queda la esperanza que el espacio que deje no se pase otros tantos años esperando a que lo rellenen con algún que otro equipamiento mientras se va usando como aparcamiento (que es el destino principal de los solares cordobeses).

En cualquier caso, la capital está salpicada de ejemplos como el suyo, con edificios que tuvieron en tiempos su vida y que ahora se deterioran a ojos vista ante la despreocupación de propios y extraños. El problema es que si se ha pensado algún uso para ellos, cuanto más tiempo se tarde en recuperarlos más costosa será la rehabilitación (y, por tanto, tanto más se lo pensará la administración de turno para meterle mano) y si se ha preferido que el tiempo se encargue de ellos mirando para otro lado, se corre el riesgo de que alguien, con la necesidad de vivienda que hay últimamente, los ocupe y acaben sepultados bajo toneladas de escombros derribados por la herrumbre.

El caso es que si algunos están ciertamente alejados del núcleo central urbano, otros, como es el caso de la antigua Simago o los almacenes de C&A se encuentran en plena zona de paso de nativos y visitantes, convirtiéndose poco a poco en nido de ratas y otras plagas que a la postre saldrán a la luz.

Habría que tomar ejemplo de lo que ha ocurrido, por ejemplo, con el antiguo edificio de la Hermandad de la sagrada familia de Cajasur, que, tras muchos años de inactividad, se ha recuperado para restauración de comida rápida, no por el ejemplo en sí de lo que ha acabado siendo o de la chapuza de sus promotores para poner en marcha las obras, sino por el hecho de su recuperación que, a la postre, acaba revitalizando la zona y la economía local.

Lo que aquí se plasma es una minúscula muestra de lo que está a la espera de que el tiempo lo acabe transformando en polvo y, si se han quedado fuera ejemplos significativos (léase, por ejemplo, las instalaciones de la antigua Iccosa), los que se incluyen son, quizá, los más representativos de lo que en su día fue Córdoba. Un pequeño trozo de historia que se acabará perdiendo, para bien o para mal.

TEXTO Y FOTOS: YOLANDA PEDROSA.

Simago
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Simago llegó a Córdoba en 1972, en lo que más de uno consideraba una competencia de Galerías Preciados a tener muy en cuenta por sus rivales. Tanto que finalmente, Galerías se hizo con la propiedad del local. Lo que no sabía el pez grande es que siempre hay alguien mayor que te puede tragar, y así ocurrió cuando El Corte Inglés, a su vez, consiguió contar con esos 15.000 metros cuadrados para sus planes de expansión, que murió antes de nacer. Ahí se han pensado varios proyectos, incluido uno que ligaba el edificio mediante una pasarela sobre Jesús y María al actual Teatro Góngora, hasta unos extraños jardines flotantes que no cuajaron, mientras que ahora se habla de reconvertirlo en una parte más del Hotel de H10 en Las Tendillas. El caso es que es un foco de insalubridad en el corazón de la ciudad, donde hay clientes de la cafetería del Hotel Córdoba Centro que aseguran haber visto a las ratas del interior salir a beber agua a la calle cuando pasa el vehículo de riego de Sadeco...

CYA
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El antiguo local de C&A en Claudio Marcelo que lleva casi 20 años cerrado es uno de los ejemplos más claros de edificios en desuso. En los últimos años se ha especulado sobre la instalación en este lugar de un mercado gastronómico, un aparcamiento o incluso ahora un gran supermercado. Se ha intentado vender o alquilar, pero hasta la fecha no ha encontrado a un interesado que le vuelva a dar vida en una de las calles del Centro que parece empezar a salir del olvido gracias a la insistencia de los propios comerciantes.

Silo de Santa Cruz
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El Silo de Santa Cruz es uno de esos edificios emblemáticos que suelen perfilar los cielos de pequeños municipios o, en este caso, barriadas, para dejar constancia de un pasado (y en muchos casos presente) eminentemente agrícola. Ese edificio era patrimonio del Estado, y la vecindad (de forma unánime) decidió que tuviera un uso social. El Ayuntamiento contactó con la Subdelegación para ver si se podría ceder o llegar a un acuerdo de venta no muy oneroso, pero la negativa dio al traste con la iniciativa. Finalmente, lo ha adquirido un particular, que está dispuesto, al parecer, a negociar con la municipalidad para ver si se le puede dar finalmente esa salida que quieren los vecinos y vecinas de un barrio excesivamente alejado del núcleo central.

Antigua sede de la UGT en la calle Marbella del Sector Sur
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En 2008 el entonces secretario general de UGT en Córdoba, Jesús Comino, ante el grave deterioro que estaba sufriendo el edificio de sus sede en la calle Marbella, decide trasladarse a un espacio de 1.600 metros cuadrados ubicado en uno de los pabellones del Antiguo Hospital Militar (la zona de la cantina), donde acabó trasladándose en mayo de 2010. El cambio no fue caprichoso. En su seno se guardaban importante documentación de la historia del sindicato en forma de Archivo que no se quería perder. El declive de la antigua sede de UGT, que pertenece al Patrimonio Sindical Acumulado del Ejecutivo central, es intenso a simple vista. Ahora lo único que hace es acumular mugre, ratas y otras plagas, justo al lado de la piscina, y ha llegado a ser lugar para 'meterse' droga dura.

definitiva iglesia campo madres de dios
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La iglesia de Campo Madre de Dios lleva a sus espaldas también 40 años de abandono. A pesar de ello, y como el mantenimiento le corresponde al Ayuntamiento, se ha realizado una intervención de urgencia para evitar que se cayeran las cubiertas. Se trata de un inmueble municipal cedido por el Obispado al Ayuntamiento el siglo pasado, que no termina de tener un uso concreto, aunque desde el Consejo de Distrito Sureste ha planteado la posibilidad de que se transforme en la Casa de las Córdobas, un centro cultural que hable sobre el legado de la ciudad califal en América. Por allí cerca nació Gonzalo Ximénez de Quesada, fundador de Santa Fe de Bogotá como excusa perfecta para ello. Habrá que ver si eso termina en buen puerto alguna vez.

Agrónomos 2
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La Escuela de Ingenieros Agrónomos y Montes (Etsiam) inaugurada en 1969 está en desuso desde que en 2008 se trasladó al Campus de Rabanales, pero antes llevaba casi 40 años ubicada en ese edificio singular en el Campus de Menéndez Pidal. Un bloque emblemático, propiedad de la UCO e inscrito como edificio singular en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz. En 2014, Prasa intentó que ese edificio de ocho plantas sobre un terreno de unos 50.000 metros cuadrados se convirtiera en hospital, pero el proyecto no se remató. En junio pasado la Universidad licitó su alquiler para usos hospitalarios, social o educativos, y sigue a la espera de que le saquen de su soltería.

Polígono de la Azucarera en Villarrubia
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La Azucarera de Villarrubia llegó a tener trabajando a cientos de empleados en su seno por ser uno de los principales núcleos industriales de la capital. Pero cerró su actividad en 1995. Ya en este siglo, en 2005, la familia Sánchez-Ramade y Moreno SA la compraron por más de 8 millones con la idea de urbanizar ese espacio. En junio pasado la Gerencia de Urbanismo la adjudicar el último paso que faltaba, el de la dirección de obra, en una actuación para urbanizar ese espacio que la GMU ha podido retomar merced a un aval de 10,5 millones. Serán 150.000 metros cuadrados para suelo industrial y de servicios, de los que 20.000 van a equipamiento y 17.000 como zona verde. El coste es de casi 4 millones.

Algodonera def
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La Algodonera (antigua Cooperativa de Cultivadores de Algodón) es símbolo del poder agrario de antaño y de un producto, el algodón, del que la provincia era una auténtica potencia. La PAC acabó dando al traste con ese cultivo sureño y la familia Martínez Sagrera desmotó por última vez en 1998. Después hubo un intento de reflotar la empresa por parte de Surcotton, firma que adquirió la Corporación Industrial Aceitera del Sur (Ciasur), sociedad que, a su vez, compró en 2002 las dos fincas principales de la antigua cooperativa. Su intento de recuperar los 150.000 metros cuadrados (50.000 de ellos con naves) de ese espacio para semillas acabó en el fango.

edificio de los juzgados
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El edificio de la antigua Audiencia Provincial de Córdoba es propiedad de la Junta de Andalucía y albergó la audiencia y los juzgados hasta finales de 2017. El edificio fue construido a principios de la década de los 70 y entró en funcionamiento en 1972. Son más de 12.000 metros construidos a lo alto, sobre una parcela de 3.500 metros cuadrados entre la antigua Conde de Vallellano y la Avenida del Aeropuerto. A principios de 2019 se formalizó el proyecto de redacción y la dirección de obra para su reforma donde, en un principio, el anterior gobierno andaluz preveía ubicar diversas oficinas de la Junta. El Ayuntamiento también le echó el ojo para uso administrativo propio.

Isabel La Católica
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El cine Isabel La Católica cerró en mayo de 2007 tras casi 40 años de andadura. Desde entonces pocos han sido los interesados en volver a dar vida a este edificios con más de 50 años de historia e incluso se especuló en que un 'famoso futbolista' lo quería convertir en macrodiscoteca (curiosamente lo mismo que ha ocurrido con el Cine Alkázar, de la calle Reyes Católicos). El edificio es desde los años 90' del siglo pasado propiedad del grupo malagueño Alfil que también regentaba las salas del cine del Centro Comercial Zoco (cerradas, también), pero tras el 'boom' del cine por Internet la empresa cerró todas sus salas. Los vecinos sueñan con un uso social para la zona.