El Consejo del Movimiento Ciudadano (CMC), que preside Juan Andrés de Gracia, se ha dirigido de forma urgente al gobierno local, a los grupos municipales y a las instancias legales de la corporación para que se paren los procesos anunciados de cesión de suelo y equipamiento municipales sin que se haya cumplido la obligación de escuchar a los órganos de participación ciudadana. De forma inmediata solicita que no se ceda el equipamiento municipal de la calle Conquistador Ordoño Álvarez a la Fundación Prode y el solar del Plan parcial Renfe a la delegación de educación para nueva residencia escolar, sin que se haya escuchado a los órganos de participación.
El reglamento orgánico de participación ciudadana en su artículo 35.2.b señala que el Consejo del Movimiento Ciudadano tiene que informar sobre 'La cesión y uso del patrimonio municipal' y en el artículo 29.3 señala que los Consejos de Distrito tiene que ser consultados sobre todo aquello que afecte a sus distritos, y así viene sucediendo de forma habitual, aunque en ocasiones no se haya cumplido el trámite de forma adecuada. Igualmente, el Reglamento orgánico de Juntas Municipales de Distrito en su artículo 5a, determina que es su competencia "conocer y efectuar el seguimiento de la actuación municipal en el distrito".
Planes de barrio
Para el Consejo del Movimiento Ciudadano, la cesión de patrimonio y equipamiento municipal debe tener en cuenta los planes de barrio y distrito a la vez que los intereses de la ciudad y que se debe al menos valorar la idoneidad de las mismas. Los barrios y distritos de la ciudad tienen unas necesidades de servicios públicos para los que es crucial el patrimonio municipal de cada territorio. Enajenar el suelo y equipamiento municipales, sea cual sea la forma legal de hacerlo, puede provocar que nos quedemos sin espacio ni sitio para cubrir las necesidades de cada territorio.
Por último, El Consejo del Movimiento Ciudadano cree que aún hay tiempo para que se respeten los reglamentos orgánicos de participación y juntas de distrito y que se eviten decisiones municipales susceptibles de ser recurridas por saltarse la normativa legal en vigor. La participación ciudadana en la cesión del patrimonio municipal asegura que se produzca con todas las garantías de que se le da el mejor uso posible sin que se afecte a las necesidades históricas de los barrios y distritos de la ciudad y evitan repercusiones no deseadas.
