El presidente del Aula del Vino, Manuel López Alejandre, ha criticado que la Universidad de Córdoba haya anunciado la creación del Aula del Vino, algo que a su juicio puede generar confusiones innecesarias. La Universidad anunciaba en su último consejo rector la puesta en marcha de este aula a iniciativa de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica y de Montes. Mismos nombres, parecidos intereses pero distinta naturaleza para dos entidades diferentes.
El Aula del Vino es una asociación sin ánimo de lucro. Fue creada en 1998. Se dedica a la formación, ofreciendo un curso anual. También organiza los premios Mezquita de vinos y desde hace seis años los Mezquita dedicados a aceites. Asimismo realiza nombramientos como "Tabernero de honor" y "Señora de las tabernas". Otra de sus actividades más conocidas es la de nombrar a socios ilustres. Entre ellos se cuentan Antonio Gala, Ginés Liébana, Arturo Fernández, José Antonio Sayagués (el famoso tabernero Pelayo de "Amar en tiempos revueltos") o el recientemente fallecido Elio Berhanyer.
Por su parte la nueva Aula del Vino anunciada por la Universidad va encaminada a fomentar la investigación en el ámbito de los vinos cordobeses, la formación y a organizar cursos y seminarios.
No es la primera confusión que afecta al Aula del Vino de Córdoba, puesto que la Cátedra de Gastronomía también de la Universidad ha empezado a conceder un premio llamado "Tabernero de honor". Ese mismo nombre es utilizado desde hace años por Aula del vino presidida por López Alejandre. El que fuera secretario del Consejo Regulador Montilla-Moriles e impulsor de la famosa Cata del Vino de Córdoba ha explicado que en este caso la Cátedra de Gastronomía solicitó el permiso y que el Aula del Vino propuso realizar el nombramiento en colaboración. Sin embargo López Alejandre asegura que finalmente el organismo universitario cesó el contacto con el Aula y persistió en la organización de unos premios con idéntico nombre.
Ambos sucesos hicieron que el Aula del Vino registrase el nombre del premio "Señora de las Tabernas" para que no pasase lo mismo. López Alejandre no atribuye estas coincidencias a la mala fe, sino "a la falta de imaginación". El presidente del Aula del Vino ha indicado en tono de broma que "con tantos catedráticos e investigadores que tiene la Universidad parece mentira que no puedan inventarse nombres distintos".
Pero en este mundo del "naming" no parece serle muy propicio a Manuel López Alejandre. En el 2009 puso en marcha la Asociación Velo de Flor, que presentó un estudio sobre las propiedades de este tipo de levaduras en los vinos de crianza. Ese estudio, pionero en ese ámbito, contó con la participación de investigadores de la Universidad de Sevilla, el hospital Clínico de Barcelona y el Reina Sofía de Córdoba, los responsables de los consejos reguladores de Montilla-Moriles, Jerez y Condado de Huelva, enólogos y el bodeguero Baldomero Moreno.
Justo en 2015 surgía en Montilla la Asociación Cultural Velo de Flor, dedicada al fomento de la cultura del vino. Organiza catas y la actividad "Brindis por Montilla".
