TRIBUNALES

El acusado de asesinar a una anciana para robar alega que estaba trabajando en el campo

La Fiscalía pide para el procesado penas que suman 30 años de cárcel al considerar que "hay pruebas" para demostrar su culpabilidad

Jurado tribunales

El hombre de unos 35 años de edad y nacionalidad marroquí, acusado de un delito de asesinato con alevosía y ensañamiento y un delito de robo en casa habitada, tras supuestamente asesinar a una anciana en su casa en la que entró a robar en la localidad cordobesa de Baena, ha manifestado este lunes ante el jurado que el día de los hechos estaba trabajando en el campo con otro varón y que nunca entraría en la casa de la mujer saltando por el patio, porque "la quería" y estaba allí casi todos los días para fumar y otras labores, junto con otras muchas personas.

Así lo ha expuesto en su defensa el procesado, que es juzgado durante los próximos días en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial y se enfrenta a penas que suman 30 años de cárcel, a petición de la Fiscalía, que considera que "hay pruebas" para demostrar su culpabilidad.

No obstante, el acusado ha remarcado que no ha hecho "nada" y que ayudaba a la mujer en distintas faenas de la casa. El varón, que llegó a Baena sobre el año 2009, ha asegurado que conocía la casa, donde iba a fumar, jugar y cocinar con el hijo de la fallecida, además de acudir a dicha vivienda numerosas personas también "a drogarse".

En cuanto al día de los hechos, ha defendido que no saltó a la vivienda, expresando que cualquier persona que le viera le reconocería porque era conocido en el municipio por ser "sociable, realizar distintos trabajos y jugar con los niños", entre otros aspectos que ha detallado, como que no sabía que el hijo de la víctima, su amigo, estuviera ingresado ese día.

Preguntado por la fiscal por qué recuerda tantos hechos de ese día, el acusado ha declarado que nunca se había drogado delante de su mujer y ese día estaba escondido de ella para que no lo viera, según ha dicho el hombre.

En relación a las testificales, la fiscal del caso ha renunciado a la reproducción de una declaración de unos 20 minutos del hijo de la víctima, ya fallecido, al no escucharse parte de ella, si bien la defensa ha pedido que se escuche en la vista oral. Ante ello, el presidente del tribunal del jurado ha informado de que la va a "volver a escuchar" y decidir si se reproduce este martes en la sala.

Por su parte, la defensa ha manifestado que "es absolutamente absurdo" que el procesado matara a la mujer, puntualizando que "no existe prueba de cargo", aunque sí algún indicio, pero como los de muchas otras personas que iban a la casa que "se había convertido en un fumadero", según ha señalado el letrado, quien ha advertido del "relato de hechos novelado" de la fiscal.

Calificación del fiscal 

En concreto, según se recoge la calificación del Ministerio Público, sobre las 15,00 horas del día 23 de abril de 2015 el procesado llegó acompañado a la calle de la vivienda por una persona que no sido identificada y tras subirse en un coche saltaron un muro que cierra un solar contiguo a la parte trasera de la casa.

Posteriormente, el acusado entró al patio del inmueble "con el propósito de apoderarse de cosas que pudieran interesarle". Mientras, en la casa se encontraba sola la mujer de 83 años de edad, que sufría sordera y graves problemas de movilidad, situación que "conocía perfectamente" el procesado al ir con frecuencia a la casa con el hijo de la víctima, a la vez que sabía que estaba sola por estar ingresado en el hospital su hijo.

De este modo, el varón encontró a la mujer en el cuarto de aseo del patio y, "sabiendo que no podía oírlo y que no tenía ninguna posibilidad de defenderse", presuntamente se acercó por la espalda y "con la intención de acabar con su vida de la manera más cruel y dolorosa posible", la golpeó con los puños en la cara y en la cabeza y después la arrastró hasta el salón donde la amordazó, la ató y la estranguló. La mujer, según el fiscal, murió "por asfixia mecánica, combinada por estrangulación y sofocación".

Después de matar a la anciana, sin testigos que pudieran interrumpirlo, el acusado registró los muebles y cajones de las habitaciones, cogió dos relojes y dos móviles, ambos propiedad del hijo. Tras ello, preparó un trozo de papel de aluminio para fumar droga. Un trozo que el procesado dejó en la mesa del salón, junto a los relojes y uno de los móviles, si bien se marchó con el otro móvil.

Cabe señalar que el acusado fue arrestado en junio de 2016, fecha desde la que está en prisión provisional, al tiempo que se encuentra en situación de estancia irregular en España.