CABRA

Condenan al pago de una multa de 90 euros a un hombre por escupir a un concejal del PP

El condenado reconoce haberle escupido pero niega que el escupitajo fuera dirigido a la persona de Juan Ramón Pérez Valenzuela de forma intencionada

Ayuntamiento de Cabra
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El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Cabra (Córdoba) ha condenado a D.P.J. como autor penalmente responsable de un delito leve de falta de respeto y consideración debida a la autoridad, a un mes de multa con una cuota diaria de tres euros --90 euros en total-- por haber escupido en una calle del municipio al concejal del PP Juan Ramón Pérez Valenzuela, supuestamente por motivos de una expropiación urbanística.

La sentencia, según indica el PP de Cabra, declara como hecho probado que sobre las 9,30 horas del 17 de mayo de 2017 el encartado se encontraba caminando por la Plaza de Ayuntamiento de Cabra, de tal modo que al observar la presencia de Juan Ramón Pérez Valenzuela, "con manifiesto desprecio hacia el principio de autoridad le escupió a la cara, sosteniendo el señor Pérez Valenzuela que al recriminarle este hecho, D.P.J. le respondió 'eso lo llevas en el cargo'".

En el auto, el juez detalla que "no ofrece credibilidad la versión del acusado cuando afirma que de nada conocía a Pérez Valenzuela" y que "no es extraño" que el condenado reconociera a la persona que se cruzaba en su camino como miembro de dicho Ayuntamiento que había gestionado el expediente de expropiación que comprometía a los intereses de su familia.

Para la juez, tampoco resulta creíble la versión de acusado, "el cual reconoce haberle escupido pero niega que el escupitajo fuera dirigido a la persona de Juan Ramón Pérez Valenzuela de forma intencionada, sino que le impactó a éste de manera fortuita y sin intención".

Sin embargo, en la grabación se puede "perfectamente visualizar cómo el escupitajo es lanzado directamente a la cara, lo que implica la necesidad de emplear cierta potencia y puntería para el lanzamiento, lo que refleja claramente una intencionalidad vejatoria", ello unido a que no concurre ninguna duda de que "dicha acción estaba directamente relacionada con la condición de teniente alcalde del denunciante, que había actuado en el expediente de expropiación forzosa antes referido, lo que denota una intencionalidad de atentar a la dignidad que encaja perfectamente en el tipo de faltar al respeto y consideración debida".