La empresa municipal de la vivienda de Córdoba, Vimcorsa, concedió el año pasado un total de 200 ayudas al alquiler, de las que la mayor parte, 115, lo fueron para evitar desahucios, según ha informado la presidenta del ente, Alba Doblas (IU). Estas ayudas se concedieron a personas que se encontraban en riesgo de perder su vivienda por los impagos al banco y que sin estas subvenciones "estarían en la calle", en palabras de Doblas. El resto de las ayudas al alquiler, 85, fueron concedidas para contratos nuevos, principalmente a jóvenes de familias en situación de hacinamiento.
Hay un "dato relevante", ha indicado Doblas, en el balance de las ayudas sociales de Vimcorsa: tres de cada cuatro subvenciones (el 77 por ciento del total) fueron a parar a mujeres. De ellas, más de la mitad (el 55 por ciento) eran familias monoparentales en las que la mujer es el único sustento, y nada menos que un 22 por ciento eran mujeres que habían sufrido violencia de género. Así, "hemos contribuido a la que la vida de 150 mujeres mejore", ha asegurado la concejal.
Vimcorsa también atendió 587 peticiones de ayuda para la rehabilitación de viviendas en la ciudad, además de otras 39 que están dentro del Plan Especial de San Martín de Porres. Treinta de estas subvenciones fueron para adaptación de los hogares, 10 para la eliminación de barreras arquitectónicas, cinco para solucionar problemas estructurales y una para elaborar el informe de evaluación ambiental.
La política de ayudas a la vivienda de Vimcorsa se ha basado en tres pilares fundamentales, tal como ha explicado su presidenta. Por un lado, el estudio de los casos uno a uno para analizar todos los aspectos y el esfuerzo económico que podía hacer la empresa pública. En segundo lugar, la inmediatez, ya que "las ayudas al alquiler o se concenden con rapidez o no son útiles". Además destaca la continuidad en la concesión de las subvenciones. Y finalmente, Doblas ha valorado la participación de los colectivos sociales en la toma de decisiones.
Por otro lado, Vimcorsa ha cerrado el ejercicio 2016 con un superávito de más de 820.000 euros, frente a las pérdidas de casi dos millones de euros del año anterior. Ello se explica, según el gerente, Rafael Ibáñez, por los vaivenes típicos del mercado inmobiliario, lo que implica que las previsiones anuales no se puedan cumplir. De hecho, Vimcorsa tenía previsto acabar el ejercicio de 2016 con una pérdidas de 725.000 euros, cuando ha obtenido superávit.
Ibáñez avanzó que en este año 2017 es posible que Vimcorsa pase por momentos de tensión en la tesorería, que se solucionarán a finales de año, probablemente en noviembre, cuando se entreguen nuevas promociones de vivienda.
