El Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) ha celebrado hoy un taller sobre detección y actuación ante el maltrato adolescente dirigido a profesionales del Servicio de Protección de Menores así como de otras entidades que trabajan con menores y, especialmente, con adolescentes.
El objetivo de esta jornada formativa es "reflexionar sobre la violencia de género en parejas jóvenes, además de dotar a profesionales de estrategias y herramientas para la detección de la violencia de género”, explicó la delegada de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, María Ángeles Luna.
En este sentido, la directora del IAM en Córdoba, Ana Díaz, añadió que el objetivo es que los profesionales que interactúan con adolescentes reciban formación que les ayude a “detectar indicadores para saber si una adolescente está sufriendo malostratos de su pareja”.
Díaz explicó que el Programa de atención psicológica a mujeres menores de edad víctimas de violencia de género del IAM atendió el año pasado a 21 jóvenes con lo que son ya 41 las atendidas desde que se puso en marcha el programa a finales de 2012. En toda Andalucía, el año pasado se atendieron a 129 adolescentes, lo que significa un 37,2% de incremento respecto al año anterior y refleja el incremento continúo que se viene detectando desde 2013.
Por otro lado, la directora del Servicio de Atención a Menores, Soledad Monterde, recordó que actualmente hay 143 menores en centros de protección, de los cuales, 65 son varones y 96 jóvenes de entre 15 y 19 años, de ahí la importancia de que el personal que los atiende conozca aspectos de las relaciones de poder en pareja así como los indicadores que pueden mostrar que una menor está sufriendo violencia machista por parte de su pareja.
Guía para madres y padres
El IAM cuenta con una guía específica para profesionales que ofrece información extensa y detallada sobre estas cuestiones, así como una Guía para madres y padres con hijas adolescentes que sufren violencia de género, en la que los padres pueden encontrar consejos para detectar a tiempo situaciones de maltrato y saber cómo actuar.
Los cambios bruscos de comportamiento y de carácter, la dependencia de la pareja a la hora de vestir, salir, etc. y pasar de una vida social rica al aislamiento de los amigos y del entorno son señales de alarma que pueden indicar que una menor está sufriendo violencia de género.
No hay que olvidar que en la actualidad existen muchas herramientas que facilitan a los maltratadores el control de las chicas, como el whatsapp, Facebook, localizadores GPS de móviles, etc. por lo que padres y madres deben estar especialmente atentos a los cambios de uso de las nuevas tecnologías.
En todo caso, siempre que se sospeche que una menor está pudiendo ser víctima de violencia machista se puede recurrir tanto al teléfono 016 –cuya llamada no queda registrada-, al IAM o a la Policía, quienes derivarán el caso a los servicios adecuados para tratarlo.
