EFEMÉRIDES

Tal día como hoy, pero de 1910, Joaquín Sorolla empezaba a pintar un cuadro en la Mezquita

El pintor valenciano hizo varios apuntes en el Patio de los Naranjos de la Mezquita dentro de un proyecto viajero
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photo_camera Postal atribuida a Señán y muy parecida a una de las perspectivas que tomó Sorolla en alguno de sus cuadro cordobeses

"Las impresiones son tan rápidas y tantas que mi cabeza es una olla de grillos. En Córdoba nos dimos un brutal atracón artístico", le escribía Joaquín Sorolla a su esposa Clotilde en una carta. El afamado pintor valenciano visitó Córdoba por primera vez, y así lo sabemos por su correspondencia, a finales de marzo de 1902.

Precisamente su mujer Clotilde le acompañó en una curiosa expedición artística, junto a sus hijas María y Elena. Además se añadió la pintora estadounidense Jane Peterson. Era una discípula suya. Sorolla la apodaba cariñosamente 'Juanita'. El encargo que tenían era pintar una serie de murales para la Hispanic Society de Nueva York. El trabajo se conoce como 'Visión de España'. El artífice de todo ello fue el mecenas también estadounidense Archer Milton Huntnigton. Se impulsó en 1910.

Y así, 'Visión de España', también conocido como 'Las regiones de España' está compuesto de 14 grandes cuadros, óleos sobre lienzo. El primero de ellos, datado en 1913, es la 'Fiesta del pan', una costumbre de Castilla. El último se titula 'La pesca del atún' y refleja esa labor situada en Ayamonte. Entre unos y otros, a modo de pintor-periodista, Sorolla por romerías, toreros, encierros, procesiones de Semana Santa o jotas aragonesas.

Pero durante los viajes el pintor valenciano iba tomando apuntes. Algunos los hizo en Córdoba, y en concreto en el patio de los Naranjos. Cuando lo hace, y empieza tal día como hoy de 1910, era uno de los personajes públicos más conocidos del país. Se cree el punto de vista del cuadro está tomado ex-profeso para alejarse de los curiosos que le abordaban continuamente. Su ficha oficial indica "La fuente, en primer término, con pináculos, a la derecha. Tras ella, una mujer y una niña, más adelantadas, cogen agua y otras figuras forman un corro en animada conversación. Frondosos árboles, entre ellos algún naranjo, dan espesas sombras".:

J. Sorolla


Este cuadro participó en aquella época en una exposición en Chicago y el San Luis, en Estados Unidos. Estuvo pintándolo en el Patio de los Naranjos de la Mezquita entre el 17 de marzo y el 20 de marzo de 1910. También se trata de un óleo sobre lienzo, pero en este caso más pequeño, 82 centímetros de altura por 105 de ancho. No es el único apunte que tomó del Patio de los Naranjos, pues también está este otro cuadro, también fechado en 1910 y muy similar a una postal de entonces atribuida a Señán, y que pueden observar como fotografía principal de este artículo.

Joaquin Sorolla y Bastida

Córdoba debió dejar en Sorolla una profunda impresión, ya que en su casa museo uno de los patios, que reproduce el ambiente andaluz, lo bautizó con el nombre de “Patio Cordobés”.