TRABAJO

El sindicato CTA irá a Fomento y la DGT por el uso de tacógrafos que casi termina en huelga de autobuses

La huelga se evitó ayer gracias a un acuerdo en el Sistema Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales en Andalucía (SERCLA) de Sevilla
Autobuses de Socibus-Secorbus en la estación de Córdoba
photo_camera Autobuses de Socibus en la estación de Córdoba

El sindicato CTA va a hacer una consulta por escrito al Ministerio de Fomento, a la Dirección General de Tráfico y a la Inspección de Trabajo sobre el uso de tacógrafos, ya que un conflicto sobre este asunto en las empresas Socibus y Secorbus estuvo a punto de convertirse hoy en huelga indefinida de no ser por un acuerdo al que llegaron ayer ambas partes.

El sindicato CTA ha realizado una breve valoración sobre eseacuerdo al que llegó ayer en el Sistema Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales en Andalucía (SERCLA) de Sevilla entre los comités de huelga y la empresa Socibus-Secorbus ante la huelga indefinida que iba a empezar hoy viernes y que quedó ayer desconvocada. El motivo, que era el expediente abierto contra nueve trabajadores por el mal uso del tacógrafo, quedó zanjado al aceptar éstos suspensión de empleo y suedo durante 20 días. CTA además sospechaba que iban a despedir a esos trabajadores.

El motivo del expediente es que los trabajadores, durante los momentos de parada de una autobús como pausas en la que los pasajeros bajan a tomar un café y estirar las piernas, colocaban el tacógrafo en posición de 'disponible', porque consideran que aunque no estén trabajando han de estar pendientes del autobús. La empresa quería que lo pusieran en 'descanso'. El expediente implicaba en principio, según indica CTA 80 días de empleo y sueldo, algo que se rebajó en el arbitraje. 

El sindicato, en un comunicado enviado a este periódico, ha explicado que "en la negociación del SERCLA de Sevilla, C.T.A. ha planteado reducir la sanción a una amonestación y realizar una consulta sobre el uso y la posición de los tacógrafos al Ministerio de Fomento y si el Ministerio de Fomento le da la razón a la empresa, nosotros aceptaríamos una sanción leve, y si nos da la razón a los trabajadores no habría sanción".

Siempre según el sindicato, la empresa, que al principio apostaba por 30 días de amonestación aceptó finalmente 20 días. Esto demuestra para CTA que "la empresa no se ha atrevido a hacer la consulta en el Ministerio de Fomento, por lo que ha demostrado, que su único interés es que no disponen de la plantilla suficiente, y su interés está en forzar a los trabajadores a que hagan un registro de muy dudosa legalidad. Por lo tanto, la empresa iba a quitarse de en medio, literalmente a estos trabajadores. Lo único que ha ocurrido es que saben que con C.T.A. la huelga iba a ser dura, y que le iba a costar bien el dinero y por eso han echado marcha atrás queriendo mantener el principio de autoridad que no la razón que no la tienen".

CTA concluye en su nota que el acuerdo es un éxito para el sindicato.