Estaba claro que las dos mociones presentadas por Vox e IU en relación a la Memoria Histórica no sólo iban a levantar ampollas ideológicas y políticas, por mucho que se quiera vender que se ha superado el pasado con la transición, sino que, además, han dejado sobre la mesa algunos planteamientos que se podrán ver en próximos plenos y que muy sabiamente la portavoz del PSOE, Isabel Ambrosio, ha sabido destacar en una de sus intervenciones.
"Más que muleta, como ha querido señalar el señor Martín Torralvo, del cogobierno de Pp y Ciudadanos, vamos a ser una piedrecita en su zapato, porque a la vista está que no están muy cómodos con nosotros", ha señalado la portavoz municipal de Vox, Paula Badanelli en el fragor del debate. Y eso ha respondido la portavoz naranja y primer teniente de alcalde, Isabel Albás, que en lugar de piedra "mejor que actúe como Betadine, porque venir con el concepto de un piedra en el zapato no es bueno ni para córdoba ni para los cordobeses".
De cualquier modo, y con cierta visión de futuro, Ambrosio ha cuestionado abiertamente si el cogobierno "¿va a tener que pedir permiso a la extrema derecha para cada paso que dé en adelante?", y hasta fue más allá al dejar sobre el Pleno flotando otra cuestión: "¿Cuánto vamos a esperar a que se pida que retiren la placa de abajo que conmemora a toda una Corporación asesinada?". El caso es cuando eso tenga lugar "nos van a tener delante con todos nuestros recursos políticos y jurídicos".
Y quizá se termine planteando llegar a ese extremo, entre otras cuestiones porque la intención de Ciudadanos y PP es modificar en efecto el nombre de esas tres vías más polémicas, con el planteamiento de Miguel Ángel Torrico de que si alguien considera que eso va contra la Ley, "que acuda a los tribunales y que lo diriman los jueces". De ahí, quizá, las palabras de Ambrosio, quien, por cierto, les ha reconocido al portavoz popular que el exedil socialista Emilio Aumente, tenía sus propias ideas al respecto "que no coinciden con lo que en ese sentido, con el nombre de las calles, tiene el Partido Socialista en el Ayuntamiento".
A efectos prácticos, ni la moción de Vox, que pretendía instar a la Junta a derogar la actual Ley de Memoria Histórica en favor de otra llamada de Consenso, ni la de IU, a favor del estricto cumplimiento de esa misma Ley, salieron adelante. Pero es que la enmienda a la totalidad presentada por PP y Ciudadanos para devolver el nombre a tres de las calles más polémicas en cumplimiento de la norma también fueron rechazadas con los votos en contra de Vox y del resto de formaciones, lo que, en efecto, da a entender un poco lo que puede ser el mandato según soplen los vientos de la llamada extrema derecha en la ciudad.
Anulados por completo los textos, en el debate se intentaron dejar claras varias ideas. Por lo pronto, y a petición del propio alcalde, José María Bellido, el secretario del Pleno, Valeriano Lavela, aseguró que devolver a las calles y plazas los nombres de Cruz Conde, Vallellano y Cañero tal cual no atenta ni contra la Ley de Memoria Histórica ni contra el acuerdo plenario. Un punto de vista muy cuestionado tanto por la portavoz socialista, Isabel Ambrosio, que se estrenaba en ese puesto, como por el portavoz de IU, Pedro García, quien interpretó que las palabras del secretario indicaban que con esas denominaciones se podría estar aludiendo a "cualquier Cañero del mundo o cualquier Vallellano", pero la realidad es que "de esa manera también aluden a personajes franquistas, con lo que sí son contrarios a la Ley".
De igual modo, fue el portavoz del PP, Miguel Ángel Torrico, quien sacó a colación que, además de esa céntrica calle peatonal ahora llamada Foro Romano, Cruz Conde presta su denominación a un parque y a un barrio de la ciudad, de los que nadie ha dicho nada, amén de que en uno de los pasillos de la casa consistorial hay un cuadro de él como alcalde. "¿Insinúa que quiere que raje ese cuadro, señor Torrico?", le llegó a preguntar la concejal de IU Alba Doblas, a quien Badanelli le preguntó a su vez: "¿Es que le apetece rajarlo, señora Doblas?".
Se ha hablado de rajar cuadros a pocos meses del incidente con una obra de arte que fue agredida por un loco en la Diputación de Córdoba por representar una imagen que para algunos suponía una ofensa religiosa. Por lo que no parecía el momento de hablar de cuchillos abriendo lienzos, precisamente. De cualquier modo, el concejal del PSOE Pepe Rojas no ha tenido pelos en la lengua a la hora de indicar que si el Pleno quiere se pueden modificar algunas cuestiones internas a fin de que ese cuadro se pudiera retirar de donde está.
En cualquier caso eran preguntas que se han quedado en el aire, al tiempo que se han producido otras respuestas contundentes y claras, como el hecho de que "Ciudadanos no quiere en absoluto derogar la Ley de Memoria Histórica, sino modificarla para que se sientan todos los andaluces representados en ella", ha señalado Albás esta mañana en el Pleno.
Algo que puede dejar, quizá, algo más tranquilo al vicepresidente del Foro Memoria Histórica de Córdoba, Luis Gabriel Naranjo, quien por dos veces ha tomado la palabra en el Pleno, bajo la atenta mirada de los concejales de Vox que estaba justo a su lado, para advertir que una "modificación cosmética de los nombres de esas calles es un fraude de Ley", y que el "respeto y la defensa a la dignidad de las más de 4.000 víctimas cordobesas de la mayor tragedia humanitaria ocurrida en Córdoba es incompatible con Vallellano, Cruz Conde o Cañero".
De igual modo, ha señalado que, si es necesario, se pondrán en marcha movilizaciones y campañas de difusión, "que no adoctrinamiento", sobre esos nombres y quiénes fueron esos personajes, se solicitaría ampara al Defensor del Pueblo, así como se iría ante la justicia española y europea. "Es de esperar que nada de esto sea necesario y se mantengan fuera de nuestras calles estos nombres".
