Ministerio de Trabajo

El paro sube en Córdoba un 2,35% el pasado mes de febrero

El secto que más parados acumula es el de los servicios, con 44.059 personas.

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photo_camera Los servicios acumulan en la provincia la mayoría del paro

El paro subió en Córdoba en el pasado mes de febrero un 2,35%. con 1.627 parados más que en enero, hasta alcanzar la cifra de 70.806, según ha informado esta mañana el Ministerio de Trabajo. La variación respecto al mismo mes del pasado año para la provincia supone, sin embargo, un descenso del -4,51%, es decir el equivalente 3.344 parados menos.

Por sectores, los servicios acumulan 44.059 parados; la agricultura, 7.622; la industria, 6.563, y la construcción, 5.760. Por su parte, el segmento de sin empleo anterior suma 6.802 parados. El único de los sectores que incrementó la cifra de parados fue la agricultura, con 1.592 personas más, por el finde las campañas de aceituna y cítricos, así como la construcción, con 41 parados más. Por contra, el mayor descenso se concretó en los servicios, con una bajada de 230 personas, mientras que la industria redujo su paro en 15 personas. El grupo de sin empleo anterior subió en 239 personas.

En cuanto al sexo, de los 70.806 parados de la provincia, 42.613 son mujeres, es decir el 60,1% del total, y hay 64.362 personas por encima de 25 años, lo que supone un 90,8%, de ellos 39.124 con también mujeres. También de ese total, hay 2.406 extranjeros en paro, de los que 1.073 pertenecen al sector de los servicios, hay 672 que forman parte de la agricultura, otros 97 son de la industria y 81, de la construcción. Sin empleo anterior son 483.

En cuanto a las contrataciones, siempre según las mismas fuentes ministeriales, a lo largo del pasado mes de febrero se firmaron en la provincia 47.936. Eso supone una fuerte bajada en comparación a enero de 15.987 contrarios, es decir un -25,01%, pero son 1.110 más que hace un año, con una subida interanual del 2,37 por ciento.

Indefinidos fueron únicamente 1.260, un 2,62% del total de contratos firmados. En comparación con enero los indefinidos bajaron en 235 (un -15,72%) y 432 menos que hace un año, con un descenso del 25,53 por ciento. Y aquí está lo realmente preocupante, porque demuestra que el empleo que se genera sigue siendo de baja calidad.

Eso lo ratifica el hecho de que temporales en febrero fueron 46.676, es decir el 96,48% del total. En comparación con enero, los temporales bajaron en 15.752 firmados (un -25,53%) y respecto al mismo mes de 2018 fueron 1.542 más, con una subida del 3,42%.

En total, en lo que va de año se han firmado 111.859 contratos, de los que indefinidos son 2.755 (el 2,46% del total) y temporales hay 109.104, que suponen el 97,54%.

Paro femenino

Para CCOO, por voz del secretario de Empleo de Córdoba, Manuel Merino, la reforma laboral está condenando a las mujeres al paro, tal y como lo demuestra el hecho de que, lejos de disminuir las cifras de desempleo femenino, mes a mes se siguen incrementando, suponiendo en el mes de febrero pasado el 60,18% de las personas desempleadas de la provincia.

"Las mujeres no están saliendo de la crisis, muy al contrario, cada vez tienen más problemas para acceder al empleo, especialmente, en el tramo de edad entre los 30 y los 45 años, en donde el 64,83% de las personas desempleadas son mujeres", advierte Merino quien también llama la atención sobre el incremento de la contratación temporal en el último año, "un tipo de contratación que afecta especialmente a las mujeres", recuerda. En este sentido, el responsable sindical apunta que mientras baja la contratación indefinida en un 25,53% respecto al mismo mes del año pasado, la contratación temporal sube un 3,42 en el mismo periodo, lo que viene a poner de manifiesto, una vez más, las deficiencias del mercado laboral cordobés.

La excesiva dependencia del sector agrícola y del sector servicios es otra de las preocupaciones de CCOO. "Basta con echar un vistazo a las cifras. De las 1.627 personas paradas más que se registraron en febrero, 1.592 eran del sector agrícola", señala. Por ello, CCOO vuelve a insistir en la necesidad de arbitrar medidas de apoyo a la industrialización y a sectores con mayor valor añadido que, además, generen un empleo más estable y de calidad y que no condenen a la mitad de la población al desempleo.