Tanto la 'Sociedad cordobesa de historia natural' como la organización 'Córdoba denuncia' han llamado la atención sobre el estado en el que se encuentra la llamada 'Fuente del elefante' debido a que acuden cerdos al lugar de una porqueriza cercana. Además del deterioro de esta alberca califal en una zona de gran paso de campistas, las condiciones del agua habían permitido que viviesen allí anfibios de gran valor ecológico.
Así lo señala la propia 'Sociedad cordobesa de historia natural' en una publicación de su página web, donde se detalla que entre estos ejemplares se encuentran especies en peligro de extinción, como el tritón jaspeado pigmeo, que en este rincón estaba casi desaparecido a principios del siglo XXI, así que fue objeto de un programa especializado para su recuperación en la zona. Como explica esta sociedad, en los años noventa su descenso en número de ejemplares se debió a que la calidad del agua cada vez era menor debido a la afluencia de vacas. Ahora son los cerdos.
En la Fuente del Elefante y charcas aledañas hay también ranita meridionales, ranas comunes, y salamandras. El programa cesó en el 2012 y con él el convenio que mantenía la Junta con la propiedad, como indica la 'Sociedad cordobesa de historia natural' que califica al lugar actual sin remilgos: "una ciénaga de orines y excrementos'.
Por su parte la organización 'Córdoba denuncia' se ha hecho eco de esta situación en su Facebook, donde critica esta destrucción del patrimonio.
La figura de la Fuente del Elefante es en realidad un réplica. La auténtica se encuentra en el Museo Diocesano. Existe otra réplica en la barriada de Trassierra. Ambas son del escultor Martín Lagares.
