El proyecto cuenta con el apoyo de la Junta

#dejatuhuella permite a consumidores y bodegas un intercambio de experiencias

Se trata de una herramienta de base tecnológica basada en una app móvil y a partir de la información que se facilita en el corcho de las botellas de vino

deja tu huella con vino
photo_camera La directora general de Industrias y Cadena Agroalimentaria, Rosa Ríos, en el proyecto #dejatuhuella

La directora general de Industrias y Cadena Agroalimentaria, Rosa Ríos, ha destacado este martes la importancia de la puesta en marcha de proyectos tecnológicos que permitan poner en valor la experiencia del consumidor ante un vino de calidad y el valor de sostenibilidad en su producción por parte de las bodegas.

Es este el caso del proyecto #dejatuhuella puesto en marcha por la Fundación para el Control de la Calidad Agroalimentaria de Andalucía (Fccaa) y en cuya presentación la directora general ha destacado la capacidad de esta actuación para que el concepto "huella" pueda "apreciarse en una doble perspectiva, la ambiental y la emocional, creando espacios comunes entre el destinatario final del vino y la bodega de origen de éste".

Las consejerías de Empleo, Empresa y Comercio y de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural colaboran con #dejatuhuella, una herramienta de base tecnológica basada en una app móvil y a partir de la información que se facilita en el corcho de las botellas de vino.

Experiencia particular

Esta aplicación permite hacer que cualquier persona que adquiere un vino pueda facilitar su experiencia particular respecto de este, lo que posibilita a los productores acceder a una información que redundará en una mejora permanente de su calidad. Esta conexión con el consumidor facilita a éste poder dejar su huella en la historia de este vino.

De la misma forma, el productor, la bodega, tiene la capacidad de transmitir al cliente el valor medioambiental de este producto por tratarse de vinos elaborados con prácticas culturales ancestrales a partir de cultivos sostenibles, algo que es cada vez más demandado por los mercados.

Este intercambio entre el productor como proveedor de un valor y el consumidor a partir de su experiencia como usuario supone, además de una conexión entre ambos, la posibilidad de formar parte del ciclo de vida del producto, en este caso el vino, conforme a los objetivos de la Fundación para el Control de la Calidad Agroalimentaria de Andalucía de proporcionar información sobre los aspectos que figuran en el etiquetado.

La directora general ha resaltado que este proyecto entronca con la política de la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural de "alcanzar nuevos mercados y adaptarnos a los gustos y tendencias de los consumidores", al tiempo que se aumenta el valor añadido de los productos agroalimentarios andaluces.