CRISIS DEL CORONAVIRUS

Empresarios cordobeses del turismo confían en su recuperación para el cuarto trimestre

El presidente de la Asociación Empresarial de Turismo de la Provincia de Córdoba (Emcotur), Antonio Ramos, ha señalado que el sector será de los más perjudicados en esta situación, pero también será uno de los que tendrá una recuperación más rápida
Turistas en la zona Patrimonio de la Humanidad de Córdoba
photo_camera Turistas en la zona Patrimonio de la Humanidad de Córdoba

El presidente de la Asociación Empresarial de Turismo de la Provincia de Córdoba (Emcotur), Antonio Ramos, ha señalado este lunes, tras analizar múltiples informes y artículos especializados que se están publicando sobre los efectos del Covid-19 en el sector turístico, ha concluido que éste será uno de los sectores más perjudicados en esta situación, pero también será uno de los que, tras la crisis sanitaria, tenga una recuperación más rápida, a partir del cuarto trimestre del año.

Así, según ha explicado Ramos en un artículo consultado por Europa Press, entre los especialistas no hay un acuerdo sobre "el tiempo que durará esta situación de bloqueo al sector turístico, hecho que dificulta la planificación de acciones de choque que motive e impuse el consumo de nuestros servicios turísticos, y especialmente de las actividades y experiencias en los destinos que nos preocupan".

Sin embargo, según ha indicado el también socio de la Consultoría Turística Adeitur, "la mayoría de ellos piensa que el sector turístico será uno de los más perjudicados, no solo en su volumen económico y destrucción de empleo, sino también por el alargamiento de la situación preventiva".

Además, Ramos ha explicado que "la transversalidad del turismo respecto a los desplazamientos, la reapertura y reactivación de alojamientos, las aglomeraciones en los espacios para grupos en la restauración, en los palacios de congresos y en los museos, o la recuperación de tesorería por el volumen de cancelaciones y devoluciones de reservas", entre otras cuestiones, "hará que el inicio de la curva ascendente de la recuperación del sector turístico empiece más tarde".

Sin embargo, según ha resaltado el presidente de Emcotur, "existe un consenso amplio en cuanto a que la recuperación pueda tener un mayor ritmo de crecimiento que el resto de sectores económicos si se cumplen ciertas pautas en la planificación en la puesta en marcha de estrategias, ya sean aplicadas, tanto a los negocios y servicios turísticos, como a los destinos. El inicio de esta recuperación podría empezar a partir del cuarto trimestre, quedándose en el camino más del 30 por ciento de todas las ganancias, pero volviendo a la normalidad en un par de trimestres".

Por supuesto, según ha aclarado Ramos, "nadie tiene claro cómo será y cómo vamos a afrontar la nueva situación económica", aunque "es seguro que habrá un cambio profundo de actitud y comportamientos, tanto desde el punto de vista puramente empresarial como personal".

Planes de márketing

A juicio de Ramos, "lo más importante, para tomar las decisiones más oportunas, será elaborar un efectivo plan de marketing a muy corto plazo. Habría que tener en cuenta cómo prevemos el comportamiento de la nueva demanda turística" y, para ello, hay que tener en cuenta "algunas de las pautas y recomendaciones aceptadas por la mayoría de los autores consultados".

Así, se va a incrementar la preferencia por el turismo de cercanía, es decir, sin salir de la comunidad autónoma o el país, o bien optar, en el caso de viajes al extranjero, por destinos que se demuestren que estén fuera de la pandemia, pero disminuirán en casi un tercio sus gastos de viaje.

En este contexto, "será importante que los negocios turísticos, especialmente los rurales y de naturaleza, así como cualquier experiencia turística o producto combinado, se diseñen adecuadamente para poder colgarlo en las plataformas 'on line' de comercialización", tomando "en cuenta valores nuevos, como la propia empatía con los clientes, para trabajar más que nunca por su fidelización".

Es decir, "el diseño adecuado del producto turístico será ahora más imprescindible que nunca, si se quiere vender en origen, ya que si antes, cuando se trataba de actividades, los viajeros solían comenzar la búsqueda antes del viaje pero la mayoría no las reservaba hasta el último momento, ahora esta situación se va a acrecentar".

En consecuencia, para Ramos, "es tiempo ahora de analizar las mejores OTAs (Online Travel Agencies) y otro tipo de plataformas para colocar el producto", para "escoger las que más se adecuen a nuestro producto" y "más vale la calidad que la cantidad", imaginando a un turista que, "durante un tiempo importante, va a elegir actividades turísticas que puedan desarrollarse sin aglomeraciones, en grupos más pequeños y, sobre todo, tomará mayor relevancia el denominado 'Slow Travel'".

Ello implica a "un turista que valorará las ofertas de alojamiento con flexibilidad en los horarios de 'checkin' y 'checkout'; un turista que va a demandar en mayor proporción que los años anteriores, y un turismo de naturaleza, dando valor al viaje en coche propio para poder disminuir los desplazamientos masivos. Esta es una oportunidad para descubrir el interior de las provincias, como complemento al turismo urbano".

En este caso, los negocios "deberán ir adaptando sus experiencias y productos turísticos a estos perfiles de demanda" y, "como estrategia de promoción, los negocios turísticos deberán considerar incrementar el valor de sus servicios por delante de abaratarlos".

Intermediación turística

Respecto a la intermediación turística también se prevén ciertos cambios de actitud. Por parte del proveedor de servicios, especialmente el alojamiento, "incrementarán más la promoción para la venta directa a los clientes debido al malestar generado por la toma de decisiones unilaterales de las OTAs más importantes con la devolución de las reservas".

Por otro lado, "el malestar se extiende, por parte de las agencias de viajes y OTAs, con las compañías aéreas. En este caso, muchas de las líneas aéreas, en lugar de devolver el dinero al cliente, le conceden bonos dejando a las agencias de viajes desprotegidas ante el cliente, ya que éste puede optar por otro tipo de viaje que ya le permite la nueva directiva europea de viajes combinados".

La conclusión es que "puede producirse políticas de promoción más agresivas para intentar que la venta al turista sea directa, hecho que las agencias de viajes y OTAs deben tener en cuenta para contrarrestar esta política, precisamente con mensajes de mayor seguridad en la salvaguarda del importe de la compra del cliente, ante cancelaciones por eventualidades del tipo que nos ocupa".

Además, los mayoristas o touroperadores "van a valorar más aquellos destinos y proveedores de servicios que incrementen el valor de atributos o políticas que antes no se consideraban tan importantes, como son la prevención de riesgos, buena imagen de limpieza e higiene, capacidad de reacción ante circunstancias adversas, controles de seguridad, servicios sanitarios cercanos, etcétera".

Respecto a los destinos turísticos, ya sean municipales, comarcales, provinciales, regionales o nacionales, "tendrán que aplicarse en la puesta en marcha de estrategias que lleven a la conversión lo antes posible, en destinos ERI (Entornos Inteligentes Turísticos) ya que se prevé que el futuro turista incremente su capacidad de elección en base al conocimiento virtual de éstos y la tecnificación de sus infraestructuras, equipamientos y atractivos".

En definitiva, un "plan de marketing con acciones concretas adoptadas a cada tipo de destino y cada tipo de empresa turística, para un periodo de muy corto plazo (tres o cuatro meses), sumado a la cohesión de las empresas turísticas entre sí y de asociaciones profesionales del territorio, serán dos condicionantes necesarios e imprescindibles para afrontar esta recuperación con la fuerza que ello requerirá en la colaboración público-privada".