CURSO DE FORMACIÓN PARA LA POLICÍA DE BARRIO

Córdoba se prepara para los delitos de odio

La ciudad no es especialmente conflictiva en la materia, pero sí hay grupos violentos a los que hay que controlar, en opinión de la fiscal Lucía Chacón. En España durante 2015 se tipificaron como delitos 1.758 casos, un 3,3% más que en el año anterior y salieron dos sentencias en Córdoba con agravante de racismo

Delitos de odio
photo_camera Lucía Chacón, Emilio Aumente y Antonio Serrano en la presentación del curso sobre delitos de odio en Córdoba

La Policía Local de Córdoba se está formando para la detección de los llamados delitos de odio, no porque la ciudad sea especialmente conflictiva en esta materia, sino con un claro carácter preventivo de cara al futuro, según ha adelantado esta mañana el concejal de Seguridad, Emilio Aumente (PSOE), durante la apertura del curso en la materia para mandos y agentes de la Policía Local en el Aula de Formación del Real Jardín Botánico.

En 2015, según datos en manos del Ministerio del Interior, en España había tipificados 1.758 actos, lo que suponía un incremento del 3,3 por ciento con respecto al año anterior, si bien, en opinión de Aumente, "son sólo los que están tipificados, pero es algo que ahora mismo está aflorando y saliendo a la luz y creemos que hay más de los que ahora mismo están tipificados como tales". Por su parte, la fiscal encargada de los delitos de odio en Córdoba, Lucía Chacón, ha puntualizado que el pasado año ya hubo en la Audiencia Provincial en Córdoba dos sentencias en las que se ha apreciado el agravante de racismo, al tiempo que en Córdoba, sin ser una ciudad de gran conflictividad en general, ríe es verdad que, aunque no son muchos, existen algunos grupos violentos e intolerantes que efectivamente pueden ser problemáticos en el futuro y pueden dar lugar a la comisión de delitos de odio, por eso hay que identificarlos y tenerlos controlados por la Policía".

Por el momento, se puede distinguir los delitos de odio de los comunes porque "el autor se mueve por una motivación de discriminación hacia un grupo o minoría con una característica común", ha añadido la fiscal. De ahí que sea primordial que en los atestados policiales "se refleje con detalle ese motivo o el móvil del autor para poder tipificarlo como tal, dado que la mayoría son delitos de apariencia común: contra la vida, la integridad física o contra la propiedad".

Policía de cercanía

Y habida cuenta que el policía más cercano al ciudadano y el primero que puede detectar este tipo de delitos, que funcionaría a modo de agravante e implicaría una pena mayor, es el de barrio, se ha organizado el curso en el que se dará a conocer la experiencia de la Policía Local de Madrid a través de un experto en la materia, así como de la Policía Nacional (con la presencia de dos oficiales de este cuerpo), y por parte de la Fiscalía todo lo referente a "cómo es un delito de odio, cómo se tipifica, qué regulación tiene en nuestro código penal, qué se ha definido como tal en los organismos internacionales, cómo van los protocolos policiales, qué problema hay ahora mismo para identificar esos delitos, cómo deben hacerse los atestados, cómo interrogar a las víctimas, qué tipo de identificación en la inspección ocular o qué tipo de reportaje fotográfico hay que elaborar".

Por su parte el jefe de la Policía Local de Córdoba, Antonio Serrano, ha apuntado que se trata de un curso que se venía demandando desde hacía tiempo, especialmente encaminada a la Policía de Barrio de ahí que en él estén participando, durante las 25 horas que dura den cada uno de los cuatro bloques de los que consta, hasta 40 manos y agentes cordobeses.

El delito de ocio existe desde siempre, pero se ha incorporado de forma reciente a nivel internacional en su tipificación, por lo que todavía carece de una definición común, si bien incluye violencia contra cualquiera que pertenezca a un determinado grupo social por motivos de raza, nacionalidad, religión, orientación sexual, etnia, ideología, discapacidad física y psíquica o pobreza. "Prevenir es lo ideal para no llegar al delito", ha explicado Aumente, y para eso "hay que tener una Policía formada y con un conocimiento del tratamiento a la víctima y de cómo actuar ante una situación muy compleja a la hora de tipificarla".