El Pleno del Ayuntamiento ha dado el visto bueno inicial a unos presupuestos que llegaban con el apoyo de Ciudadanos y a última hora de esta mañana de Ganemos Córdoba, pero con el voto en contra del Grupo Mixto-UCOR y del PP, que plantearon, a su vez, un total de 34 enmiendas que tuvieron que ser rechazadas una a una.
El debate estuvo marcado por lo ya dicho durante los días previos. Es decir, que se trata de unas cuentas mucho más sociales que las del pasado mandato, en palabras de los que estaban a favor, hasta el punto de que la concejal de Hacienda, Alba doblas, llegó a señalar que “podemos decir con orgullo que éstos son los presupuestos de la izquierda”, frente a los que consideraron que eran inasumibles por desequilibrar el plan de saneamiento y de reducción de deuda con proveedores y hasta se quedaban cortos en materia de inversiones.
Por este motivo, el portavoz del PP, José María Bellido, planteó la retirada del orden del día y una enmienda a la totalidad que incluía inversiones por 100 millones de euros en los próximos cuatro años, que fueron rechazadas ambas contando únicamente con la abstención del Grupo Mixto-UCOR, mientras que todos los demás tumbaron la propuesta. La misma suerte corrieron las seis enmiendas del UCOR que fueron rebatidas una a una por Doblas y que únicamente recibieron el sí propio y de los populares.
Entre tanto, José Luis Vilches, de C’s, justificó su apoyo al hecho de que “hablando hemos conseguido llegar a acuerdos en seis de las ocho propuestas que planteamos y eso indica que es más lo que nos une que lo que nos separa, mientras que por parte de Ganemos, su portavoz, Rafael de los Ríos, prefirió dejar de lado las carencias para centrarse en lo aceptado esta misma mañana por PSOE e IU y que básicamente se centraba en la puesta en marcha de una auditoría social y ciudadana de las cuentas, la reducción del gasto en alumbrado extraordinario, la renegociación de las condiciones financieras de los créditos, el uso de los edificios municipales en desuso, la planificación de los recursos humanos del Consistorio o la inclusión del colegio Félix Ortega en el catálogo de espacios municipales en desuso para su cesión a colectivos sociales.
El voto inicial a favor sale adelante con la amenaza por parte de Bellido de impugnar las cuentas municipales de 2016 por una cuestión legal: “El hecho de que la Junta paga tarde y mal en materia de dependencia y hay que dejar claro que ese dinero no se puede gastar hasta que no se tenga realmente a mano”. Una advertencia que hizo en rueda de prensa anterior, pero que no volvió a citar en la celebración de la sesión plenaria.
