Según el Boletín Estadístico del Personal al Servicio de las Administraciones Públicas, editado por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, desde 2011 se han perdido 4.959 puestos de trabajo públicos, lo que supone un 10%. A fecha de 1 de julio de 2015 son 976 menos que en las mismas fechas de 2014, lo que supone una merma superior al 2%.
La presidenta de CSIF en Córdoba, Dolores Navajas, califica de “muy preocupante” la destrucción de empleo público en la provincia en los últimos cuatro años, lo que repercute muy negativamente en la calidad de los servicios que recibe la ciudadanía”.
Navajas considera que la situación en Córdoba es “particularmente muy mala”, ya que es una de las provincias andaluzas donde más empleo ha desaparecido. En la comunidad autónoma la destrucción ha sido del 7%, mientras que en España ha sido del 5%, la mitad que en Córdoba.
Todas las administraciones han destruido empleo en el último cuatrienio. El ámbito institucional en el que la reducción de puestos ha sido mayor en este periodo ha sido la Junta de Andalucía, ya que en este caso se han perdido 2.208 empleos, quedándose el total en 23.315. CSIF da mucha relevancia a este dato, ya que dentro de la Administración autonómica se incluyen áreas tan sensibles para la sociedad como Enseñanza y Sanidad. En el primero de estos servicios se han quedado por el camino 565 empleos desde 2011, mientras que en los hospitales y centros de salud las plantillas han menguado en más de 500 personas.
En lo que respecta a la Administración General del Estado, el número de trabajadores en la provincia ha descendido en 918, mientras que en los ayuntamientos y en la Diputación su personal se ha reducido en 1.571 personas, un ámbito también muy sensible al estar encargados de la seguridad ciudadana a través de la Policía Local. Por su parte, la Universidad de Córdoba (UCO) ha visto mermada su plantilla en 262 personas.
Dolores Navajas señaló que, pese a que la tasa de reposición del 10% ya no está vigente, las administraciones siguen sin aumentar las contrataciones y se acumulan varios años con un bajo nivel de relevo en los puestos, lo que repercute directamente en la calidad de los servicios públicos. Esta escasez de trabajadores causa listas de espera en los centros de salud y en los hospitales, así como problemas de seguridad por la falta de policías locales, entre otras consecuencias.
La máxima responsable de CSIF Córdoba remarca que la pérdida de empleo público no es el único problema que afecta al personal de las administraciones, sino que se ha detectado una precariedad creciente. Así, por ejemplo, aunque el SAS ha anunciado que todas las contrataciones para cubrir las bajas se están realizando ya al 100%, aún hay muchos puestos que se siguen contratando al 75 y al 50%.
A todo esto hay que añadir el mantenimiento de la jornada de 37,5 horas, una realidad a la que siempre se ha posicionado en contra CSIF, cuyos servicios jurídicos han conseguido diversas sentencias a su favor en este campo. Además, se ha producido la pérdida de poder adquisitivo que han sufrido los empleados públicos en los últimos años, que de media ha sido de entre un 30 y un 40%. “Los empleados públicos hemos visto perder gran parte de nuestras retribuciones, sobre todo por el impago de las pagas extra desde hace algunos años y las sucesivas congelaciones de nuestro salario”, concluye Dolores Navajas.
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2015 (julio) |
2011 (julio) |
Variación absoluta |
Variación relativa |
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Administración General del Estado |
8.117 |
9.035 |
-918 |
-10% |
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Junta de Andalucía |
23.315 |
25.523 |
-2.208 |
-8% |
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Administración Local |
10.557 |
12.128 |
-1.571 |
-13% |
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Universidad |
1.876 |
2.138 |
-262 |
-12% |
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TOTAL |
43.865 |
48.159 |
-4.959 |
-10% |
Fuente: Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas
