El pasado 2018 ha sido un año de inversiones en el Centro de Control Animal de Sadeco. De hecho, la inversión ha ascendido a más de 170.000 euros que se han utilizado, entre otras cosas, para poner en marcha un nuevo quirófano que no tenía el centro y con el que "se ha conseguido atender de forma inmediata a los animales que llegan en malas condiciones o con heridas", ha señalado el presidente de la empresa pública, Pedro García.
Así, ha destacado también el incremento de la relación con las protectoras de animales con las que se han firmado numerosos convenios con los que se está mejorando el bienestar de los animales de la ciudad, a la vez que se ha iniciado el programa de voluntariado.
En este sentido, y con el objetivo en mente del sacrificio 'cero' se han fomentado mucho las adopciones en 2018, se ha instaurado la vacuna y desparasitación de todos los animales, se han ubicado a los cachorros en un lugar separado del resto de animales y se ha puesto en marcha un programa por el que se pone música todos los días un rato a los animales. En definitiva, una serie de mejoras que, "evidentemente, supone un incremento de costes y de personal, con un grupo de veterinarios que trabaja por el mayor bienestar animal", ha explicado, por su parte, la veterinaria del Centro de Control Animal, Elena Jiménez.
Otras de las mejoras han sido la de individualizar las perreras, que evita el contagio entre los propios animales, o los cambios en el sistema de limpieza que se hace mediante valdeo, por lo que los animales salen fuera protegidos por una chapas metálicos que evitan que los animales se mojen.
Sea como sea, el Centro de Control Animal cuenta de media con más de 400 animales, "cuando hace unos años no se superaba el centenar", ha asegurado Jiménez, quien ha añadido que actualmente se ha incrementado la media de estancia a más de 45 días y que el sacrificio "se pretende que sea el menor posible y tan sólo de tipo humanitario cuando son animales muy mayores o enfermos".
Entre los proyectos pendientes se encuentra construir una sala multiusos para dar charlas o acoger visitas de los colegios, terminar la sala de voluntariado que contará con una zona para bañar y acicalar a los animales, e instalar una zona de paseo de animales con juegos para que los inquilinos de cuatro patas hagan ejercicio.
