La jornada intensiva en el sector de la Construcción sumará 10 días laborales más en el año 2020. Así lo han acordado este lunes UGT-FICA (Federación de Industria, Construcción y Agro de UGT Córdoba), la Federación de Construcción y Servicios de CCOO y la Asociación de Empresarios de la Construcción de Córdoba en la firma del calendario laboral correspondiente al próximo año. De esta forma, el período reducido abarcará desde el 15 de junio hasta el 11 de septiembre de 2020, lo que supone un total de 64 días laborales en un sector que afecta en Córdoba a unos 15.000 trabajadores y trabajadoras.
Según los firmantes, el calendario ha sido elaborado conforme a la jornada de 1.736 horas anuales que dispone el vigente convenio general de la construcción, cuyo reajuste del calendario anual ha permitido aumentar los días laborables a 64 en que los trabajadores realizarán una jornada intensiva durante el verano. Todo ello, para prevenir “golpes de calor” y que no se produzcan accidentes relacionados con la salud y la seguridad en el trabajo.
Con el establecimiento de la jornada intensiva en los meses de verano, que fija como limite 7 horas diarias de trabajo, se hace una recomendación a las empresas del sector para que su inicio tenga lugar no más tarde de las 07:00 horas de la mañana, dándose por finalizada la misma, como máximo, a las 14.00 horas. Asimismo, durante los días 6, 7 y 8 de abril, que corresponden a lunes, martes y miércoles de Semana Santa, se hará jornada continuada de cinco horas con treinta minutos los dos primeros días y de cinco horas el tercero. Además, como todos los años, el viernes de Feria de Nuestra Señora de la Salud, 29 de mayo, también tendrá la consideración de no laborable.
Este calendario tiene como finalidad determinar las fechas en las que puedan tener lugar los descansos necesarios para dar cumplimiento a la jornada anual pactada para el año 2020, evitándose de esta forma, los excesos que pudieran producirse.
Para el responsable de Construcción de UGT-FICA Córdoba, Manuel Mejías, este reajuste “permite proteger más días a los trabajadores de las altas temperaturas que se alcanzan durante los meses de verano en nuestra provincia”. Así, “damos un paso más en la prevención contra los golpes de calor, que tantos accidentes laborales provocan cada año en los trabajos a la intemperie”.
