El pleno del Ayuntamiento de Córdoba ha aprobado hoy las ordenanzas fiscales rechazando a su vez las alegaciones presentadas. El equipo de gobierno, compuesto por PP y Cs, ha obtenido el apoyo de Vox y el rechazo del resto de la oposición. PSOE, IU y Podemos han votado en contra, a pesar de que se hicieran conjeturas en días anteriores sobre la posibilidad de que se obtuviese la abstención del PSOE de la misma forma que el PP se abstuvo para dar luz verde a los presupuestos de la Diputación. A su vez, el voto de Vox pareció estar comprometido hasta última hora.
Las ordenanzas fiscales suponen una rebaja total, entre impuestos y tasas, del 1'92%. En concreto 1'98 de rebaja en impuestos y 1'52 en el caso de las tasas. En este sentido, el concejal de Hacienda, Salvador Fuentes, la ha calificado de "rebaja histórica". A su vez ha afirmado que estas cuentas se pueden compaginar perfectamente con la mejora de los servicios públicos. Fuentes ha indicado que quieren "que esta sea la Córdoba de los padres pero también de los hijos; queremos que se queden en la ciudad".
El acuerdo con Vox ha estado fundamentado fundamentado en un par de puntos. En uno de ellos este partido había insistido en los últimos meses, la disminución de Impuesto de Bienes Inmuebles rústico un 7% con el objetivo de irlo equiparando a la media española en los años venideros, puesto que Córdoba tiene el más caro del país. En concreto, los socios de gobierno y Vox se han marcado el 2023 para este objetivo.
El otro punto que ha permitido el apoyo de Vox ha sido la disminución del impuesto de vehículos para el caso de los ciclomotores.
En su intervención, Salvador Fuentes, ha destacado otras rebajas, como el alivio fiscal para los que deseen regular sus parcelas o la bajada de un 15% para las licencias de apertura.
Intervenciones y debate
Tras Fuentes intervino Cristina Pedrajas por Podemos. Pedrajas denunció la opacidad y falta de transparencia del actual equipo de gobierno, además de que los impuestos municipales no fueran progresivos. Igualmente calificó de temeraria la reducción de ingresos y criticó la falta de consenso, considerando fingida su búsqueda por parte del alcalde o el concejal de Hacienda.
Tras Pedrajas llegó el turno de la portavoz de Vox, Paula Badanelli, que definió a su partido como "un partido liberal que entiende que el dinero está mejor en el bolsillo de los ciudadano en lugar de en la administración, donde puede perderse en gastos superfluos cuando no en administraciones paralelas". A pesar del acuerdo alcanzado con el equipo de gobierno, Badanelli cree que la bajada es insuficiente y que en cualquier caso la producida tiene la impronta de VOX.
Tras Vox tomó la palabra Alba Doblas, portavoz de IU, que al igual que la portavoz de Podemos consideró que no ha habido diálogo real. "Diálogo no es dar los buenos días por el pasillo", le espetó al alcalde. Doblas ha considerado que por las formas en presentar las ordenanzas, con los plazos a su juicio tan forzados, el pleno ni siquiera se debería haber celebrado por falta de seguridad jurídica.
La actual cabeza de la oposición y exalcaldesa, Isabel Ambrosio, fue dura al criticar también los plazos, a su juicio in extremis, en los que se han presentado las ordenanzas, señalando en concreto que el documento se registró hoy a las 9:06 y que los responsables de intervención sólo han tenido una hora y cuarenta y cinco minutos para analizarlo, lo que le ha parecido una "falta de respeto absoluto". Además ha detallado que estas ordenanzas "ponen en peligro los presupuestos...que nadie conoce". Igualmente ha señalado que el documento tiene erratas y, en general -y en eso coincide con el resto de la oposición- en que no reparten entre la población. Fuentes replicó más tarde que durante el mandato anterior hubo informes de intervención extremadamente críticos con las cuestas del anterior equipo de gobierno y que incluso "se los podía encuadernar".
Por su parte Cs, a través de su portavoz, Isabel Albás, se felicitó por unas ordenanzas que disminuían la presión fiscal, pero pronto cambió el tono de todo el debate, hasta el momento centrado en las propias ordenanzas, pues dirigió las críticas al PSOE que ha intervenido las cuentas de Andalucía y también refirió episodios de corrupción del PSOE andaluz, incluidas las visitas a prostíbulos de altos cargos Fundación Andaluza Fondo para la Formación y el Empleo (Faffe).
Esta alteración del rumbo del debate surtió efecto y en siguientes intervenciones se fue perdiendo la concreción sobre los impuestos cordobeses para atender razones políticas más generales en diversos rifirrafes, de hecho Fuentes en una intervención posterior se sumó al asunto de la intervención y criticó a la actual ministra de Hacienda, María Jesús Montero, no si antes recordarle a Ambrosio que en su mandato no bajó los impuestos aunque podía "por tener 140 millones de euros en el cajón".
Como decimos a partir de ese cambio propiciado por Albás, se sucedieron algunas pequeñas réplicas que hacían referencias mucho menos específicas o se perdían en defensas de los votos conseguidos con respecto a elecciones anteriores, como en el caso de otra intervención de Ambrosio.
Tras la votación, con PP, Cs y Vox a favor y PSOE, IU y Podemos en contra, Fuentes hizo hincapié en posteriores intentos de diálogo para llegar a acuerdos, quizá teniendo la vista ya en los presupuestos.
Consejo del Movimiento Ciudadano
El pleno empezó con la intervención de Juan Andrés de Gracia, presidente del Consejo del Movimiento Ciudadano, quien se lamentó de que este equipo de gobierno rechazase las alegaciones presentadas tanto por el consejo como por la Federación de Asociaciones de Vecinos Al-Zahara. Estas sugerencias, explicó, se sumaron al documento pero no han influido para modificar nada. De Gracia, como los miembros de la oposición, se mostró también preocupado por la bajada de los ingresos al disminuir impuestos y tasas.
