Una de las cuestiones más importantes para empezar a funcionar en un ayuntamiento son sus cuentas anuales. Por eso en el de Córdoba se está tratando de llegar a acuerdos algún grupo de la oposición para poder aprobar el presupuesto de 2020, y en este punto, el alcalde, José María Bellido (PP), ha señalado esta mañana que el viernes se intentará aprobar las cuentas en una Junta de Gobierno Local (JGL) extraordinaria para poder llevarla a Pleno.
El alcalde de Córdoba, José María Bellido (PP), ha informado de que este viernes se intentará aprobar en la Junta de Gobierno Local el anteproyecto de presupuestos para 2020 e iniciar todo el procedimiento para su aprobación en el Pleno. Ello requiere de una negociación con lo grupos restantes y todo apunta a Vox, porque el regidor ha mostrado sus dudas sobre la voluntad de PSOE de hablar, tras "las maniobras de distracción" que está llevando a cabo.
Por contra, el partido de la ultraderecha "sí tiene una disposición leal y responsable con la ciudad para negociar, aunque en algún consejo haya mostrado sus discrepancias con lo que hay, pero en términos generales está dispuesto"., ha expuesto.
En el mismo sentido se ha manifestado su segunda de abordo en el cogobierno, Isabel Albás (Cs), quien, por su parte, ha indicado que "se aceptan los planeamientos de otros grupos, siempre que no desvirtúen el planteamiento nuestro que a una generación vista". Y en este sentido, "puede ser Vox o cualquier otro grupo con ideas buenas, porque si es bueno para la ciudad su procedencia no condiciona siempre que se centren en lo importante: Qué, cómo, por qué y el resultado para la ciudad".
Bellido, además, ha insistido en que en los últimos meses "nos hemos topado con trabas del PSOE en forma de llamadas a consejeros que son independientes en algunos consejos rectores para ver si podían forzar un voto negativo que impidiera que se aprobara y retrasara todo"
Por ello el regidor considera que la formación liderada por Isabel Ambrosio "está jugando de farol", es decir que por un lado transmite la imagen de estar dispuestos a hablar y negociar por la ciudad y "por detrás hacen todo lo que puedan para que no se aprueben los presupuestos, porque parece que lo único que les interesa es que cuanto peor, mejor".
