La alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio, ha anunciado esta mañana, en el marco de unas Jornadas sobre Turismo en la sede de la Confederación de Empresarios de Córdoba (CECO), que todavía sigue pendiente de anular la relación contractual entre el Ayuntamiento y la empresa que se encargó inicialmente de las obras del Centro de Convenciones del Parque Joyero, la granadina UCOP Construcciones.
Una situación que se tiene que llevar a cabo al mismo tiempo que se tiene que sacar a licitación lo que resta de la obras y se elabora el modelo de gestión que se quiere plantear desde el Consistorio para ese espacio. De este modo se podrá hacer uso del equipamiento una vez que todo esté terminado.
En cualquier caso y para las tres cuestiones, "seguimos esperando el informe por parte del Consejo Consultivo a fin de poder dar los actos administrativos necesarios para avanzar en el proceso". Se trata de la misma idea que ha planteado luego en las Jornadas de CECO el concejal de Presidencia, Emilio Aumente, a la representación que estaba presente en la reunión de la patronal cordobesa.
El pasado mes de febrero, el propio Aumente dio a conocer que esta iniciativa se había quedado definitivamente bloqueada y a la espera de una solución que iba a suponer varios meses resolverla, como de hecho está ocurriendo. , como poco, supondrá meses de retrasos.
El equipo de gobierno municipal ya conocía de antemano que las obras no iban a estar terminadas a tiempo, a pesar de las sucesivas prórrogas concedidas a la constructora. De hecho, diferentes informes técnicos alertaron de que las actuaciones no habían avanzado ni siquiera a la mitad cuando ya había finalizado el plazo para su terminación. Y, además, en los cuatro últimos meses de 2016 la granadina había paralizado de facto las obras, con lo que las certificaciones mensuales, que justificaban el avance en la construcción y obligaban al Ayuntamiento a hacer frente a los pagos, sumaban cantidades ridículas.
Informes de los arquitectos
Los informes de la dirección facultativa -los arquitectos encargados de supervisar toda la obra, que no pertenecen a la empresa adjudicataria, sino que fueron nombrados por el anterior gobierno del PP- reflejaban que se había "podido comprobar la muy baja actividad" en el edificio del Parque Joyero, así como "el ritmo inusualmente bajo" para una obra de esta envergadura.
En cifras redondas, en septiembre de 2016 UCOP facturó por valor de 67.000 euros; en octubre, 136.000; en noviembre tan sólo 288 euros, una cantidad difícil de explicar; y en diciembre, última certificación de la que se tiene constancia, 2.000 euros.
Todo ello para ejecutar una obra que debió estar terminada el verano del pasado año y que cuesta 10,5 millones de euros. Tras la última prórroga concedida hasta febrero por el Consistorio, aún falta por finalizar el 47,64% de los trabajos por valor de 5,2 millones de euros.
