La agricultura, con 2.473 desempleados más, ha tirado de la subida del paro registrada en el mes de febrero y que ha supuesto sumar a la lista de demandantes de empleo a 3.382 personas, lo que supone un incremento del 3,93% respecto al mes de enero, según los datos publicados hoy por el Servicio de Empleo Público (SEPE) que indican que en Córdoba hay 89.458 personas desempleadas.
La fuerte subida del paro en el sector agrícola viene justificada por el final de la campaña de la aceituna, fundamentalmente, mientras que el incremento del desempleo en el sector servicios (512) viene marcado por el final de la temporada de rebajas.
El paro se ha incrementado en todos los sectores, siendo el mayor alza tras agricultura y servicios la del sector de Sin Empleo Anterior, que ha añadido 328 desempleados.
Tampoco es bueno el dato de contratación, ya que cayó un 20,64% respecto al primer mes del año, con 38.834 contratos realizados, 10.102 menos que un mes antes. Como es habitual, la contratación temporal supone la mayor parte de los contratos realizados durante el pasado febrero, si bien cabe reseñar que la contratación indefinida mejoró respecto a enero, ya que sumó 143 contratos más, lo que representa un 14,19% de incremento. Por el contrario, la contratación temporal, con 37.683 de los contratos formalizados, sufrió un descenso respecto a enero del 21,38%, con 10.245 acuerdos laborales menos.
Reacciones
El secretario General de CCOO de Córdoba, Rafael Rodríguez, ha afirmado que “las administraciones deben poner ya pie en pared y empezar a hacer proyectos que impulsen las potencialidades que tiene nuestra provincia, que es de las últimas del país en empleo y en afiliación a la Seguridad Social”.
El responsable sindical, que lamentó el descenso de afiliados a la Seguridad Social, considera que se debe impulsar la industria apoyada en esas potencialidades: La agroindustria, la investigación, las energías renovables, etc. y recuerda a las administraciones locales que “ya es hora de sentarnos a discutir sobre la concertación local y provincial porque creemos que a partir de ahí es donde encontraremos mecanismos que a nuestra provincia le sirvan para salir de esta situación”.
Su homóloga de UGT, Isabel Araque, decía que “son datos malos” y que “angustian” porque son “la radiografía del tipo de empleo que se crea en la provincia de Córdoba. Estamos sometidos, abocados a un empleo de campaña en agricultura y de turismo y de servicios cuando toca”.
Araque hizo un llamamiento al empresariado y afirmó que “la inversión industrial tiene que reaccionar” porque “todo no se puede hacer desde las administraciones”.
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios, CSIF, de Córdoba considera “muy preocupante” el incremento del paro registrado en febrero en la provincia. Su presidenta en Córdoba, Dolores Navajas, coincidió con las otras fuerzas sindicales en que es "fundamental reformar y renovar la Concertación Social, haciéndola “mucho más plural, democrática y, sobre todo, eficaz y eficiente en la lucha contra el desempleo”.
La alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio, reconoció que la realidad es “dura y cruda” y que las personas en desempleo siguen siendo la prioridad del Ayuntamiento “a pesar de no tener todos los recursos que nos gustaría, a pesar de no tener todas las competencias que nos gustarían, esto no es una cuestión de competencias, sino de responsabilidad y somos conscientes de que esta es la primera y la más grande de las preocupaciones a día de hoy”.
Por eso, Ambrosio comentó que en estos últimos meses se ha realizado un diagnóstico sobre el modelo productivo en el que se puede basar la ciudad de Córdoba para avanzar y no estar pendiente de campañas estacionales y temporales, un modelo que tiene que ver con la innovación, el emprendimiento, con el comercio y el turismo, pero teniendo en cuenta también la construcción, la joyería o el sector agroalimentario. “No es una tarea fácil que vaya a dar resultados de hoy para mañana pero es una tarea que si el Ayuntamiento suma las aportaciones y las propuestas de todos y cada uno de los agentes económicos y sociales y se coloca como locomotora de un tren en el que se sume todo el mundo, creo que va a ser un poquito más fácil encontrarnos en un escenario dentro de un año un poquito más positivo de lo que tenemos a día de hoy”.
