Resulta curioso que ni siquiera en el Grado de Historia de la Universidad de Córdoba (UCO) haya una asignatura específica sobre Historia de Andalucía. Sin embargo, en la institución académica, el profesor de Derecho Civil Antonio Manuel Rodríguez es patrono de la Fundación Blas Infante, entre un vastísimo abanico de compromisos por su activismo social (ateneos, causas sociales como la titularidad de la Mezquita-Catedral o contra la salvaje modificación del PGOU de su pueblo, Almodóvar del Río). Sería inabarcable citar todas las áreas de conocimiento de Antonio Manuel; todos sus libros, artículos, ensayos, colaboraciones en temas tan complejos como el flamenco (Arqueología de lo jondo, Editorial Almuzara 2018), la historia de Al-Ándalus (La huella morisca, Editorial Almuzara 2016) y la historia de Andalucía (Andalucía. Teoría y fundamento político, junto a Manuel Pimentel, Editorial Almuzara, 2016).
Sin duda, es la persona adecuada para hablar de nacionalismo andaluz -que no regionalismo-, de identidad, de un pueblo de jornaleros sí, pero también de filósofos, médicos, científicos, escritores, pintores, músicos. Un pueblo que fue el centro del mundo durante muchos siglos, un pueblo que ha mirado siempre más hacia el Mediterráneo que hacia el Norte, porque en sus raíces está Al-Ándalus, y está la cultura sefardí.
Un pasado nada reconocido en el presente. Por eso, repasamos con él la historia reciente de Andalucía, una tierra clave en este mundo globalizado por su materia prima de un valor excepcional y único, por su patrimonio, huella de un pasado esplendoroso, todo ello legado a un pueblo que es la suma de muchos, cada uno con un habla y una idiosincrasia gracias al mar Mediterráneo, a la Sierra Morena, al Flamenco, al ser de izquierdas.
Día importante el de hoy para Andalucía, pero no tanto como el próximo martes, el 4 de diciembre. ¿Somos conscientes los andaluces de la importancia del 4-D?
El 4 de diciembre de 1977 va a reconfigurar la historia no solo de Andalucía, de toda España. Aún quedaba un año para la promulgación de la Constitución Española, estamos en pleno proceso constituyente, la sociedad española está debatiendo cómo configurar la democracia después de una dictadura; la relación Iglesia-Estado, el sistema de Gobierno, los derechos sociales y el modelo territorial.
"Es 1977 y el pueblo andaluz, en una especie de intuición mágica e histórica, descubre que va a ser maltratado en comparación a otros territorios, sobre todo Euskadi y Cataluña"
Ya entonces, el pueblo andaluz, en una especie de intuición mágica e histórica, descubre que va a ser maltratado en comparación con otros territorios, en particular Cataluña y Euskadi. El pueblo sabe que la solución a sus males no puede venir ni de la dictadura ni del centralismo; exige democracia y autonomía.
El pueblo andaluz, un año antes de la Constitución sale a la calle exigiendo su derecho a decidir Andalucía "como el que más"; con el rango de nación. Salimos a la calle para pedir libertad, amnistía y Estatuto de Autonomía. Recalco, un año antes. El 4 de diciembre equivale, pasado el tiempo a que el pueblo andaluz exige su derecho a decidir.
Pero, "para ser como la que más" connota cierto complejo de inferioridad.
Bueno, en ese momento no se veía así, sino una conciencia de subalternidad, que parece lo mismo, pero no es igual. El pueblo andaluz se sabe dependiente del centralismo y que gran parte de sus fortalezas están en Cataluña y en Alemania; han migrado. No es que tengan un déficit de autoestima, justamente lo contrario, lo que tienen es un superávit de fortaleza, porque la cultura andaluza estaba en el aire, se respiraba Triana, Lole y Manuel, Carlos Cano, la vanguardia cultural de España, que era andaluza, y además estaban unidos a la reivindicación social.
Andalucía y reivindicación social eran el mismo concepto.
¿Qué ha pasado para que se desinfle ese sentimiento de andalucismo?
No es un sentimiento regional y te explico por qué. A principios del siglo XX el concepto 'regionalista' era muy aceptado dentro del marco federal. Pero tras 1977 en Andalucía estaba normalizado el concepto de 'país' y se hablaba de 'país andaluz', sin tapujos.
En el Estatuto de Autonomía y la Constitución Española que en su artículo 2 dice que España se constituye por nacionalidades y regiones. Andalucía es una realidad nacional tal y como se decía en el Manifiesto de Córdoba de 1919.
"Tras 1977 en Andalucía estaba normalizado el concepto de 'país' y se hablaba de 'país andaluz', sin tapujos"
El problema es que confundimos el concepto de 'nación' con el de 'estado'. 'Nación' proviene del término 'nacer', que surge cuando el pueblo francés se rebela contra la monarquía y la iglesia para reclamar el poder democrático, del pueblo. Los pueblos cuando son reconocidos como naciones suben un escalón en la personalidad jurídica, porque son reconocidos políticamente.
Una nación puede ser estado o no; hay estados sin nación, como El Vaticano, y naciones sin estado, como Palestina. Y hay naciones como Andalucía que el 4 de diciembre se reivindican como nación y en ningún momento tienen la más mínima vocación de ser estado.
Sin embargo, Andalucía consigue el 28 de febrero el mismo rango jurídico y constitucional que Cataluña, Euskadi y Galicia, nacionalidades históricas por concesión.
Luego, Andalucía es una nación.
¿Qué papel tuvo Córdoba en todo el proceso de constitución autonómica?
Un papel fundamental. Blas Infante se lo reconoce desde el principio. La primera gran asamblea donde se hilvana la reivindicación social es en Ronda, en 1918, el mismo día que las faenaeras de Málaga reivindican pan en las calles. El siguiente paso será el Manifiesto de la Nacional de Córdoba del 1 de enero de 1919, tras lo que se celebrará la Asamblea de Córdoba y en 1933 también se celebra aquí la reunión del proyecto sobre el manifiesto del que será el Estatuto de Autonomía de Andalucía.
Córdoba tiene el valor simbólico de haber sido la capital histórica del conjunto de ciudades andaluzas unidas por una memoria común, representada en la Bética, la España bizantina, Al-Ándalus. Y en los tres momentos históricos, la capital es Córdoba.
"Andalucía logra el 28 de febrero el mismo rango jurídico y constitucional que Cataluña, Euskadi y Galicia, nacionalidades históricas por concesión; luego, Andalucía es una nación"
A todo ello hay que sumar el fuerte componente revolucionario de Córdoba en 1919. Aquí se desarrolla el denominado 'trienio bolchevique' del que habla Juan Díaz de Moral en su 'Historia de agitaciones campesinas andaluzas'.
¿Por qué no hay partidos nacionalistas andaluces?
En 1977, un año antes de la Constitución Española, hay una fuerte reivindicación autonomista trasversal, por parte de la izquierda, pero también por parte de personas de centro como Manuel Clavero Arévalo, que dimitió como ministro, porque a Andalucía no se le quería conceder el mismo rango que a Cataluña y que a Euskadi o Galicia.
A partir de ese momento, Rafael Escudero, presidente de la Junta de Autonomía capitanea el movimiento andalucista y en lugar de actuar como un socialista andaluz, decide actuar como un andaluz socialista, pero tiene muy claro que izquierda y Andalucía van de la mano, porque la derecha no ha creído nunca en Andalucía. La derecha más regionalista es esencialmente española y nacional católica.
¿Esto lo puedo escribir?
Vamos a ver, es que es que el españolismo y el nacionalcatolicismo es la misma cosa, y actualmente con mayor crudeza, porque quienes ponen banderas españolas en los balcones en realidad están poniendo banderas de cara al sol y banderas anticatalanistas. No defienden la unidad de España, defienden la homogeneidad del país, que no se respete la identidad de cada pueblo que forma la realidad nacional.
El PSOE siembre se ha atribuido el andalucismo, aunque ahora Adelante Andalucía parece querer arrebatárselo
El PSOE siempre se ha atribuido ese espacio simbólico, aunque no real, porque no se ha comportado como andaluz; ha unido hasta hace poco las elecciones generales con las autonómicas privando a Andalucía de un debate propio hasta que por medio de una iniciativa legislativa popular conseguimos que tuvieran una convocatoria electoral propia.
¿Y por qué el PSOE llegó a apropiarse simbólicamente, que no real, del andalucismo? Porque el Partido Socialista Andaluz (PSA) le regaló la 'S' e Izquierda Unida (IU) le regaló 'Andalucía' y se quedó solo con la izquierda. También el Partido Comunista Andaluz (PCA) 'abandonó' Andalucía y el Partido Andalucista (PA) abandonó la izquierda. Le entregaron todo el espacio al PSOE, fueron 'muletas' de su gobierno.
Sin embargo, ahora ha ocurrido algo radicalmente distinto; Susana Díaz, por primera vez en mucho tiempo ha abandonado a Andalucía yéndose a liderar las Generales en España; sale de Andalucía entregándole el gobierno a Mariano Rajoy, "se hace de derechas" y pacta por primera vez con un partido que ni es de izquierdas ni es andalucista: C's.
El PSOE abandona su espacio natural simbólico, pero afortunadamente ha surgido una opción que sí ha entendido que tiene que volver a unir la izquierda con Andalucía más allá de unas siglas o de una ideología política diferenciadora, han buscado los puntos en común de las izquierdas: ANDALUCÍA.
Manuel Pimentel sí que intentó impulsar un andalucismo, aunque fuese de derechas.
El Partido Andalucista sin duda fue un ejemplo de intento de andalucismo desde el centro, siguiendo la senda de Clavero Arévalo. Hoy esa derecha no existe.
"Un partido andalucista que no sea de izquierdas, ecologista y feminista está avocado al fracaso porque ese es el común denominador de nuestra tierra"
El PA no sobrevivió a sus propias incoherencias; si defiendes los intereses de Andalucía tienes que ser de izquierdas pero si vas a pactar con el PP, "yo a ti no te creo". Quienes intentamos resucitarlo nos encontramos con un cadáver, un zombi.
Un partido andalucista que no sea de izquierdas, ecologista y feminista está avocado al fracaso porque ese es el común denominador de nuestra tierra.
Volviendo al andalucismo, ¿Adelante Andalucía recoge los intereses de todos los andaluces por muy de izquierdas que pueda a llegar a ser una tierra?
Es que gran parte de los andaluces se han 'derechizado' con la llegada de la crisis de representatividad política debido a la gestión económica y los casos de corrupción política. A nivel estatal, ese hueco lo ocupó Podemos como alternativa de cambio.
Pero los andaluces se dieron cuenta de que Podemos no miraba a Andalucía, sino que la quería para su gran proyecto de estado de forma jacobina y centralista pero, afortunadamente, Podemos Andalucía e Izquierda Unida se han dado cuenta y han 'tirado para su tierra' con Adelante Andalucía.
Pero han sido un poco excluyentes. Si hubieran incorporado todas las mareas y plataformas ciudadanas se hubiera representado mejor la diversidad que es Andalucía.
Es que no creo que Adelante Andalucía sea un proyecto electoralista para hoy, es el germen de un partido andalucista y andaluz. Esto es un camino, no un punto y final. Es el comienzo de un proyecto donde vuelve a unirse el andalucismo con independencia de los intereses de los partidos.
