El equipo que dirige Luis Carrión se ejercitó en horario matinal en el césped de la Ciudad Deportiva dando comienzo a la semana de preparación de la vuelta a El Arcángel ante el Real Oviedo (domingo, 20.30 horas). La salvación está cerca, quizá a un paso. El punto del Carranza abrió las alas blanquiverdes a la esperanza de certificar la permanencia cuanto antes. Y los califas, bajo un sol enorme, trabajaron con intensidad, enchufados, con ganas de fútbol. Con la mente en puntuar, ganar a los carballones en casa y liquidar la intranquilidad de toda la temporada.
La hora y media de sesión preparatoria viene siendo habitual en los últimos meses de competición. El cuerpo técnico diseñó un entreno con mucha presencia de balón. Rondos, llegadas por banda y doble vuelta de partidillos a medio campo fueron trabajados por la totalidad de los hombres disponibles para Luis Carrión; que son todos los de la primera plantilla, incluidos Esteve y Javi Galán, y con la excepción de los lesionados Cisma y Héctor Rodas, quien todavía no se ha dejado ver por la Ciudad Deportiva y sigue en fase de recuperación. Caballero, baja ante el Cádiz CF por un problema familiar, se incorporó al grupo y está preparado para entrar en convocatoria si así lo considera el míster.
Rodri dio el susto
La jornada transcurrió con normalidad. Sólo Rodri, al poco de empezar, dio un pequeño susto. El soriano pisó mal en un remate y tuvo que ser atendido; pero se recuperó sin problemas y terminó el entrenamiento sin mayores consecuencias. Tras la sesión de recuperación del lunes, el descanso de ayer, y el entrenamiento de hoy, el Córdoba CF continuará la preparación mañana y el viernes, por la mañana, en sesiones abiertas al público.
