Flamenco Fusión

Lourdes Pastor denuncia con su 'Martinete Feminista' la situación actual de las mujeres

Su último trabajo se convierte en un grito por la salud, la vida y la libertad de todas las mujeres del mundo

La artista cordobesa Lourdes Pastor ha sacado a la luz su último trabajo 'Martinete Feminista', a través del cuál denuncia la situación actual de las mujeres. Desde el más profundo 'quejío' del Flamenco, Lourdes Pastor pone de manifiesto que las mujeres, por el mero hecho de serlo, viven situaciones de desigualdad y sometimiento en todas las sociedades. Este cante es un grito por la salud, la vida y la libertad de todas las mujeres del mundo.

Este 'Martinete Feminista' nace de la necesidad de expresar el dolor y la tristeza ante una realidad que vulnera los derechos fundamentales de las mujeres. Es respuesta a una sociedad que aún en el siglo XXI parece no entender o no aceptar que las mujeres son más de la mitad de la población y que tienen derecho a ser ciudadanas en todas las dimensiones.

El arte es una herramienta poderosa para transformar conciencias, porque llega directamente al corazón. Es por ello por lo que con uno de los palos del flamenco más duros, el cante que nació de la fragua a golpe de martillo, ha traído su pensamiento para defender "con toda la fuerza necesaria que los derechos de las mujeres no se negocian, no se cuestionan, no se venden", señala la cordobesa.

La violencia contra las mujeres es una forma de violencia específica, se ejerce contra ellas por el mero hecho de ser mujeres. Los asesinatos de las mujeres no son hechos aislados, sino que parten de una estructura patriarcal que se arrastra históricamente, en la que las mujeres siempre han estado subordinadas al poder masculino, en lo público y también en lo privado.

Una estructura, según la cantante, en la que la violencia puede reconocerse en todos los niveles. Desde la violencia sexual a través de las violaciones, la prostitución, la pornografía o la mutilación genital, la violencia económica con la desigualdad salarial entre mujeres y varones o el impago de pensiones de los padres a sus hijas e hijos, la violencia simbólica con la estética impuesta a las mujeres, "por un lado los burkas y por el otro la silicona, con los roles asignados que casi forman una segunda piel a través de los cuales nos advierten de que ser 'una buena mujer' conlleva callar ante el padre, ante el marido, ante el hijo, ante el líder, ante Dios".

Una violencia invisible que forma parte del sistema y que es la que legitima que en 2018 aún se 'alquile' a mujeres para dejarlas embarazadas y luego comprarles sus bebés; que la maternidad sea toda una odisea cuando además de madre decide desarrollar su ser social o profesional; una violencia que legitima que las carreteras estén llenas de prostíbulos; legitima que se agreda y se cuestione que la defensa de los derechos de las mujeres es imprescindible si se quiere hablar de un Estado de Derecho.

Lourdes Pastor es artista, socióloga y activista feminista. Cuenta con dos discos en el mercado en el que a través del Flamenco Fusión reivindica los derechos de las mujeres y los más excluidos de la Tierra. Premiada recientemente por su labor como impulsora de las mujeres en este cante es pionera del Flamenco feminista en este país.