Se podría decir que todo el Patio de Barrionuevo, 43 es singular en cuanto a vegetación y plantas se refiere. Es, además, un espacio tremendamente atractivo para la vista, agradable para todos los sentidos, habitado por vecinos, con elementos encantadores y dos alturas desde la que poder disfrutar de todos sus rincones con calma y charlando con José Antonio López, uno de sus habitantes y el 'culpable' de que un rosal, que acaba de ser galardonado, hoy en día cubra prácticamente una de las paredes del recinto en una gran masa vegetal de cuatro por cuatro metros, aproximadamente.
El caso es que todos los años, dentro del Festival de Los Patios, y en muy estrecha colaboración con el Real Jardín Botánico de Córdoba, se concede el Galardón la Plan Singular, que ha recaído en este rosal 'Trueque', aunque también se le conozca más popularmente por su tipo de flor como de 'pitiminí'. Y no se extrañen, está bautizado así porque desde el Botánico se ha tratado de buscar esa variedad y a día de hoy no está registrada como tal, por lo que desde Córdoba se ha dedicado bautizarlo como el Patio elegido como Centro de Interpretación de Los patios, donde se sabe que está el primer ejemplar de este tipo de rosal.
Es más, según ha señalado Carmen Jiménez, conservadora de colecciones del Botánico cordobés, en breve se va registrar con ese nombre en el Registro Oficial de Rosales que está ubicado en Londres y a partir de entonces en todo el mundo se le conocerá con ese nombre. Actualmente, el de Trueque, 4 (que se data de los años 70 del siglo pasado), así como el de la Casa de las Campanas (vástago del anterior) y el de Barrionuevo, 43, son los tres únicos recintos que cuentan con esta variedad en sus recintos, "pero estamos seguros de que se va a extender mucho más a partir de ahora", señala la técnica.
Concretamente, el rosal premiado tiene 24 años y comenzó siendo un esqueje de apenas 20 centímetros que tanto López como su esposa recogieron en el Paseo de Las Victoria en plena época de poda. Ahora tiene unos 4,5 o 5 metros de alto y unos 4 de ancho y para el año que viene será todavía más frondoso. Este Patio, en concreto se viene presentando a Concurso desde 1995, si bien ha estado fuera de la competición durante nueve años para volver con fuerza en esta edición y llevarse un muy merecido premio.
Y no es la única especie singular y llamativa que tienen en el recinto. Según ha expresado Carmen Jiménez, hay clerodendros, diamelas (una de ellas de doble, es decir una Duque de Toscana), colas de mono, jazmines azules, una inmensa buganvilla, limoneros y naranjos y abundancia de enredaderas, que hacen de esta Patio un lugar "vivo durante todo el año y no sólo en la primavera".
Cuenta, además, con un pozo árabe del siglo XVI, cuya agua se usa para regar, y tiene el relevo generacional asegurado (sólo hay cuatro más, por ahora, con esta suerte) en la figura de José Antonio López hijo (junior, que dirían en América) y que desde muy pequeño, junto a su padre, y un vecino, Eduardo (barcelonés de nacimiento y cordobés de adopción) ha mamado literalmente el amor por las plantas y por el cuidado de un Patio, donde hacen vida de convivencia como antaño.
El galardón ha sido entregado a la familia (y vecinos) por la concejal de Medio Ambiente, Amparo Pernichi (IU), quien ha destacado que se trata de un ejemplar muy especial, con una única floración al año (coincidente felizmente con el Festival de Patios) y con ls flores en ramillete en lugar de individuales. Muy probablemente haya nacido de una mezcla de rosas europeas, chinas y americanas para dar un tipo de rosa winchuraina como la que se puede ver en ese recinto.
Y como curiosidad, a raíz de este particular bautizo cordobés, recordar que con Los Patios como telón de fondo se están dando nombre desde Córdoba a numerosos ejemplares, especialmente de geranios (pelargonium)., que también van a ser registrados en breve, con nombres tales como 'Parra', 'Flor de azafrán', 'San Basilio', 'Payaso' o 'Flor Rociera'.
