Con salida en Conde de Vallellano y llegada en la Puerta del Puente, la 31ª edición de la Medio Maratón de Córdoba del próximo 29 de noviembre repite recorrido con el propósito de que esta prueba deportiva, además de su carácter popular y competitivo, se una a la promoción del turismo al contar con la llegada en tan señalado lugar y parte de su recorrido por la Ribera o Miraflores. La prueba, ante el interés cada vez mayor, ha aumentado este año el número de inscripciones hasta 7.000. Para comparar, baste decir que en su primera edición participaron 514 corredores.
Su presentación oficial ha tenido lugar en el Alcázar de los Reyes Cristianos, donde han intervenido el responsable de Juventud y Deportes de la Diputación, Martín Torralbo; el delegado de Deportes, Educación e Infancia del Ayuntamiento, Antonio Rojas, y el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Córdoba, Pedro García.
La participación lleva consigo el regalo de camisetas y una medalla conmemorativa. Al margen de eso, hay trofeos y premios en metálico para los ganadores de las diversas categorías: general, veteranos, discapacitados, discapacitados a pie, clubes jóvenes y clubes veteranos. En el campo individual, estos premios van de los 50 euros de los terceros clasificados hasta los 250 euros del primer clasificado en la prueba general.
En atención al número de participantes, desde los poco más de 500 de la primera edición se puede ver un crecimiento progresivo conforme el deporte se asentaba como forma de ocio y salud hasta el año 2011, en el que participaron 3.592 personas. A partir de ahí, la afición al ahora llamado 'running' parece haberse disparado. En el 2012 ya son 4.000 los inscritos, repiten en 2013, el año pasado, 6.000 y este, 7.000. En pruebas de ciudades más pequeñas hay medias maratones con más participación. En Córdoba, al terminar el plazo en septiembre se queda en unos números que probablemente fuesen mayores de ampliarlo, uno de los puntos habitualmente criticados por muchos deportistas.
A lo largo del circuito habrá cuatro puntos de avituallamiento de agua. A cien metros de esos puntos, contenedores para poder dejar el botellín. En el kilómetro 15 al agua se le une el avituallamiento de fruta. Al terminar hay dos puntos más. Agua y bebida isotónica en Amador de los Ríos; fruta y bocadillo en la Avenida del Alcázar.
Como suele ser habitual, la noche de antes tendrá lugar la cena de la pasta y la fruta, a las 20.00 horas, en el pabellón deportivo de Vista Alegre. En ese mismo lugar, viernes y sábado, tiene lugar la Feria del Corredor, con expositores relacionados con esta actividad.
