El espíritu 'hippie' sale de Claremont Road, en Londres, y de Haight Ashbury, en San Francisco, para llegar hasta Córdoba. Y es que en pocos años una calle del centro de la capital se ha convertido en la 'Green street' por excelencia. Productos ecológicos, de comercio justo, naturales y sostenibles con el medio ambiente se han hecho un hueco en la filosofía de vida de muchos cordobeses. ¿Dónde? en la calle Gutierrez de los Ríos.
Esta vía urbana, conocida popularmente por la gente del barrio como la calle Almonas, se ha convertido a lo largo de sus doscientos metros, en el auténtico corazón verde (o alternativo, si lo prefieren) de la ciudad. En ella se puede encontrar de todo. Detergentes, champús, geles, jabones, todo tipo de pasta (como polenta, quinoa o espaguetis), productos de belleza, mermeladas, aceites, vinos, quesos... Todo con el sello ecológico y con la garantía de haber cumplido con un proceso justo de comercialización.
Rosario Rivas es la propietaria de 'La Yerbas', una herboristería en la que se puede encontrar una muy variada clase de remedios naturales, además de una grandísima multiplicidad de productos ecológicos. Según explica, esta calle "es un poco peculiar por la serie de negocios que se han montado", pero en realidad, "se trata de una calle muy común, como la de cualquier otro barrio". Entre su clientela se encuentran "desde personas mayores, curiosos, estudiantes, la verdad que es un público muy variado, pero lo que sí es verdad es que suelen estar familiarizados con este tipo de productos y tienen sensibilidad por las cosas naturales o ecológicas".
Unos metros más adelante, y en dirección a la Plaza de la Almagra, nos encontramos con otra de las tiendas 'estrella' de la calle, 'La Tejedora'. Esta asociación nació con la intención de acercar otro tipo de productos al consumidor, señala Mari Paz, una de sus trabajadoras. En esta tienda "tenemos desde productos ecológicos, de comercio justo, hasta productos locales que fomentan la cercanía de barrio". Por resaltar los más vendidos, continua Mari Paz, "yo diría las verduras ecológicas, o los vinos que también los tenemos ecológicos y de la tierra, o los productos de economía social y solidaria; es que la verdad es que es muy variado, porque también tenemos artesanías y cosmética natural".
Esta trabajadora y también socia de 'La Tejedora', cuenta que "cuando nació el proyecto los principales clientes eran los socios, pero con el paso del tiempo se ha ido abriendo la clientela y ya no es solo para hippies". Poco a poco, continua, "empezamos a tener clientes conscientes del cuidado del medio ambiente y también de las condiciones laborales de las personas que están detrás de estos productos".
En cuanto al precio de los productos, "puede parecer que son más caros, pero si tenemos en cuenta diferentes criterios, como el sueldo digno de los trabajadores o un transporte bueno, eso hay que pagarlo".
Paseando por esta 'Calle Verde' encontramos a María Luisa, una clienta asidua a todas las tiendas que aquí se ubican. Según cuenta a este periódico, "yo vengo mucho a 'La Yerbas' porque no uso medicina tradicional y también vengo mucho a 'La Tejedora' porque soy socia y me gustan mucho sus productos". Entre las compras habituales en su cesta, señala, no falta nunca "aceite, vino, unas tortas muy buenas que venden aquí, a veces verdura y también queso". Entre los motivos que la llevan a frecuentar estos establecimientos se encuentra la calidad de los productos, ya que "procuro comprar siempre lo mejor y también tengo mucho en cuenta que sean justos con el trato que se le da al productor".
En plena plaza de la Almagra se encuentra 'La Vuelta al Mundo'. Una tienda de bicicletas donde su filosofía es "el fomento del transporte sostenible". Uno de sus socios, Andrés Raya, explica que los clientes de esta tienda son "normalmente vecinos de por aquí que viven y trabajan por el centro, y los tenemos de todas las edades". Principalmente, añade, "el que acude a esta tienda es usuario de bicicleta y va buscando algo de más calidad". Por ello, en 'La Vuelta al Mundo' se han especializado en la personalización de todo tipo de bicicletas, además de la venta de segunda mano, de repuestos y también en el alquiler para turistas.
"También hacemos mensajería en bicicleta, sobre todo paquetería pequeña, como documentación y sobres", de manera que "de esta forma estamos apoyando el transporte sostenible", explica Andrés. Para paquetes de mayores dimensiones "contamos con un triciclo con apoyo eléctrico para hacer el reparto".
